Lo visto en el tramo final de la eliminatoria de Copa Libertadores entre Atlético Nacional y Rosario Centra no es fútbol. En el tiempo de compensación del complemento, Orlando Berrío marcó el gol con el que el verdolaga aseguró su presencia en las semifinales de la competencia continental.
Para festejar, el delantero colombiano se volvió loco y le cantó el gol en la cara al arquero de Rosario Central, Sebastián Sosa. El cancerbero, consciente de que durante todo el partido se habían estado provocando, no hizo nada al respecto. Pero sus compañeros se le lanzaron con todo a Berrío, y al resto de jugadores del club colombiano.
¿El saldo de todo el show? Berrío y Musto expulsado. Después, con la calentura provocada, Lo Celso, de Rosario, también fue expulsado. Al final del partido, las cosas siguieron con la misma temperatura e incluso se vio a Coudet, entrenador del club argentino, entrando al campo para buscar a Alex Mejía, jugador del Atlético Nacional.
Tras el partido, Berrío explicó por qué le festejo el gol en la cara a Sosa: “No fue la manera de desahogarme, reconozco que me equivoqué. Pero cuando se meten con tu color de piel es feo”. Los insultos de Sosa también habrían sido para Marlos Moreno, quien se unió al efusivo festejo de Berrío.
Sosa, tras el partido, le resto importancia a lo sucedido: «Estaba por terminar, era la última jugada y no la pudimos defender. ¿Con Berrío? Nos insultamos todo el partido pero son cosas que quedan en la cancha. Ya está».
Ojalá haya sanciones ejemplares para los involucrados (especialmente Sosa y Berrío) porque está claro que todo este carnaval no tiene nada que ver con el fútbol.