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Sin necesidad de hablar mucho, el argentino Lionel Messi tranquilizó a sus socios Neymar y Luis Suárez, quienes estaban muy revolucionados en el partido de UEFA Champions League entre FC Barcelona y Celtic Glasgow.
Con el gafete de capitán ante la ausencia de Iniesta, el ’10’ entendió a la perfección su rol y pudo bajarle a los reclamos y gestos de sus dos compañeros de ofensiva. Unos cuantos gestos del cinco veces ganador del Balón de Oro le bastaron a Lucho y Neymar para calmarse de cara al cierre de partido.
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EL CAPITÁN MESSI EN GLASGOW
No sólo los que gritan y hablan mucho son líderes en un equipo de fútbol…
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