En el entrenamiento previo al partido de Liga ante Deportivo se vivió un gran ambiente entre los jugadores del Real Madrid. Prueba de ello fue la manera en la que Luka Modric reaccionó luego de recibir un balonazo de parte de Keylor Navas
Aunque no pudo evitar gritar porque no se esperaba el impacto, Modric se tomó con buen rollo el golpe que se llevó e incluso siguió bromeando con Navas. El arquero costarricense le ofreció la mano al mediocampista croata en señal de disculpa…
Gestos que parecen poco importantes, pero que dicen mucho de lo que es el grupo actual en el Real Madrid. Hay mucha unión y compañerismo, que son elementos clave para que un equipo pueda enlazar 34 partidos consecutivos sin perder. Esta armonía es uno de los mayores aciertos de la gestión de Zinedine Zidane