A unas horas de asistir al Real Madrid vs Napoli de la UEFA Champions League, Diego Armando Maradona se vio involucrado en un nuevo escándalo. La cosa no fue lo que se temió, pero el campeón del mundo en México 1986 fue ‘acusado’ de un supuesto episodio de violencia hacia su pareja en el hotel, en el que están hospedados en Madrid.
De acuerdo al reporte de medios españoles y el propio abogado de Maradona, todo fue un malentendido. Gente del hotel habría llamado a la policía tras una fuerte discusión entre Maradona y Rocío Oliva, pensando en que la situación se había salido de control.
La Policía Nacional llegó al lugar y no encontró indicios de una agresión física de Maradona contra su pareja, quien habría explicado que todo quedó en una fuerte discusión. Por esta razón, Maradona no fue detenido ni imputado.
Una vez aclarado el tema con la policía, El Diez dio su versión en su cuenta oficial de Facebook: «Quiero decirle a todos que me encuentro en Madrid, disfrutando de mi familia, y esperando el partido del Napoli, por la Champions. Mi abogado Matías Morla se comunicó con las autoridades españolas. No hay ninguna denuncia y nadie le supo explicar el motivo de este show mediático. Estoy pasando por un gran momento, que la cuenten como quieran…».
LA VERSIÓN DEL ABOGADO
El abogado de Maradona, Matías Marlo, relató lo que ocurrió, en charla con Ciudad.com: «Me llamó Diego, noté que estaba medio mal por una discusión, pero normal. Después, me empezaron a llamar los asistentes que tiene él allá para comentarme que estaba llegando la Policía. Entonces, hablé con Diego cuando estaba la Policía, y conversé lo más bien también con Rocío. No se sabe por qué motivo llegó la Policía, porque lo que hizo Rocío fue llamar a la recepción para pedir otra habitación, lo único que quería era no estar con Diego por un momento, como cualquier persona en la vida privada que se pelea con su pareja y no se quieren ver la cara por dos horas».
«Pero como estaban en un hotel, no le quedaba otra porque él no puede bajar al lobby porque es Maradona, entonces ella tuvo que pedir otro cuarto. Eso, sumado a algún griterío, se interpretó como una situación de agresión. Constataron en actas que no había presencia de ni de alcohol ni drogas y que ninguno presentaba lesiones. Después, les preguntaron si querían levantar alguna denuncia formal por algún delito y dijeron que no».
En conclusión: una fuerte discusión entre Maradona y su pareja despertó sospechas de un episodio de agresión. Gente del hotel llamó a la Policía y ésta, cuando llegó, no encontró ningún indicio de violencia. Al final, la situación se aclaró y El Diego comenzó a cumplir con sus compromisos del día.