La novela lleva varios capítulos, pero vamos a tratar de resumirla. El lunes, Walter Gargano habló para un medio uruguayo y dijo, entre muchas otras cosas, que Antonio Mohamed lo ha maltratado e insinuó que es un DT-representante (se queda con dinero de algunos jugadores).
El mismo lunes, Mohamed y Davino desmintieron todo. Y horas después, ya el martes, el mediocentro uruguayo salió a disculparse en una transmisión de Instagram. No dijo que había mentido ni se retractó como tal, simplemente confesó que habló estando caliente y se disculpó con las personas que pudieron haberse sentido ofendidas.
Muchos pensaron que la cosa pararía ahí, pero no. Y es que, El Turco Mohamed, ha anunciado que llevara esta situación ante la justicia. Es decir: el entrenador de Rayados procederá para que todo esto se resuelva vía legal. En entrevista para TDN, el multicampeón DT aseguró que no le basta una disculpa en redes sociales.
Llevará el caso a lo legal. «El sentir que tengo es que cualquiera puede decir cualquier cosa, pero tiene que atenerse a las consecuencias. En este caso, lo único que me interesa es aclarar lo que pasó y la única manera de aclararlo es en la justicia (…) Vamos a seguir hasta las últimas instancias para que esto se aclare. Y es la única instancia que yo puedo conocer en este momento, porque cualquiera puede acusar a cualquier persona de muchas cosas, pero la honestidad, en este caso, está en juego».
Gargano tendrá que hacerse cargo de lo que dijo. «Yo tengo 24 años en el país, y por un jugador que por una decisión deportiva y en caliente ensucia a cualquiera, a mí una disculpa en redes sociales no me llena. Tiene que hacerse cargo de lo que dijo y comprobarlo ante la justicia».
El club está con él. «El club me da todo el apoyo, tanto legal como afectivo. Y también mateniéndome mi trabajo. Porque, si hubiese la mínima sospecha, yo no estaría en mi trabajo. Me siento muy respaldado, muy contento por el respaldo incondicional de parte de la directiva».
No dejará que pongan en duda su dignidad e integridad. «Pero, bueno, está en juego la dignidad y yo no voy a dejar que cualquiera pueda decir algo sobre mí, sobre mi integridad, sobre mi trabajo, porque me ha costado mucho. Yo empecé desde primera A y me ha costado mucho llegar a este nivel, como entrenador. No es justo que un jugador, porque está caliente, hable cualquier cosa, sabiendo que se va del club. Porque, cuando llegó, estuvo dos años, y nunca dijo nada cara a cara. Tendrá que hacerse cargo ante la justicia de lo que dijo. Me parece que es un caso cerrado, no quiero darle más vuelta».
¿Qué opinan sobre toda esta situación, Invictos? ¿A quién le creen?