Manchester United llegó en mejor forma al encuentro después de haber vencido, en las dos primeras fechas, al West Bromwich y Tottenham, mientras que el Arsenal venía de empatar ante Newcastle y caer contra el Liverpool,
Los red devils saltaron al terreno de juego con un 4-4-2 formado por: De Gea; Smaling, Jones, Evans, Evra; Nani, Cleverley, Anderson, Young; Rooney y Welbeck. Arsenal, por su parte, comenzó el partido con un 4-3-3: Szczęsny; Jenkinson, Djourou, Koscielny, Traore; Ramsey, Coquelin, Rosicky; Walcott, Van Persie, Arshavin.E
El equipo de Sir Alex Ferguson no tardó mucho en ponerse en ventaja. Al 22′, Welbeck rompió el cero a pase de Anderson. El brasileño recibió el balón y, sin pensar mucho, lo bombeó al centro del área. Welbeck encontró la redonda y la mandó guardar con un buen remate de cabeza. Arsenal pudo empatarlo cinco minutos después con un penal, pero Robin van Persie se encontró con David De Gea.
RVP falló, Young no. El mediocampista inglés sacó un bombazo de fuera del área que dejó sin chance al arquero polaco. A pesar de la desventaja, Arsenal siguió insistiendo, pero David De Gea estaba en plan grande. Manchester United volvió a dar muestra de su contundencia al 41′, cuando Rooney colgó del ángulo superior izquierdo un tiro libre. Arsenal descontó al 43′ por conducto de Walcott, en un tanto que daba ‘esperanza’ a los gunners.
Algunos pensaron que Arsenal reaccionaría en el complemento, pero Manchester United organizó un carnaval. Rooney hizo el 4-1 con otro gran gol de tiro libre. La quinta anotación fue obra de Luis Nani, quien clareó a Szczesny. Y al 70′, Park Ji Sung se hizo presente con un disparo cruzado. Robin van Persie decoraría el marcador con un disparo que De Gea no logró contener.
Cuando parecía que las cosas no podían estar peor, Arsenal se quedó con 10 hombres al 76′ por una falta de Jenkinson sobre Hernández. Minutos después, en el 81’, Rooney selló su hat-trick marcando de penal. En el tiempo de compensación, United marcaría el ultimo tanto de la noche con un espectacular zapatazo de Ashley Young.
NOCHE INOLVIDABLE PARA LA AFICIÓN DEL UNITED