Previo al partido decisivo del campeonato de Décima División ante Rosario Central en la Ciudad Deportiva de Granadero Baigorria, Maximiliano Pariente, jugador de las categorías inferiores de Newell’s Old Boys, reunió a todos sus compañeros e inició una emotiva arenga para motivar a los suyos.
«Estamos en una nueva final. Hoy tenemos el partido en el que consagramos todo lo que hicimos durante el año. Acordáte el primer día que te viste, el 20 de enero. Acordáte de ese día. Todos los entrenamientos. Todas las prácticas. Todas las veces que saliste exhausto. Hoy se corona eso, muchachos. Hoy el triunfo lo regalamos todos nosotros. Hoy salimos campeones, muchachos. Hoy con todo adentro de la cancha, a dejar todo. Quiero que nos abracemos cuando terminemos, sea cual sea el resultado, y que digamos que dejamos todo por esta camiseta porque es la más grande de todo Rosario«, dijo Max, que apenas es un niño, pero habla como hombre.
#Décima: Arenga leproso antes del partido. pic.twitter.com/iT8FZ1bK05
— Juveniles CANOB (@CANOBjuveniles) 13 de noviembre de 2016
El discurso motivacional sirvió, ya que Newell’s sacó un resultado (0-0) que le permitió celebrar la consecución de su bicampeonato en la décima división de Argentina.
#DécimaDivisión:
El festejo de los chicos #Bicampeones…#VamosLosPibes. pic.twitter.com/P38XrQguf2— Juveniles CANOB (@CANOBjuveniles) 13 de noviembre de 2016