Thiago nació en Italia, pasó algunos años en Brasil e hizo gran parte de su formación futbolística en España. Rafinha, por su parte, nació en Brasil, pasó varios años ahí y, al igual que se hermano, se formó en España. La intención de Mazinho, su padre, era que ambos representaran a su país de origen, que se pusieran la camiseta con la que él conquistó la Copa del Mundo en 1994. Sin embargo, el mayor de los Alcántara se terminó decantando por España.
Según conto Rafinha, en entrevista para France Football, Thiago siempre se mostró convencido de ser parte de los combinados españoles. Y el sentimiento se agudizó tras los éxitos en categorías inferiores (campeón europeo U17 y bicampeón europeo U19): «Desde pequeño, y sobre todo alrededor de sus 14-15 años, no había duda. Para Thiago, fue España. Fue con La Roja desde que descubrió las selecciones juveniles y no hubo incertidumbre en su elección».
A Rafinha también lo llegaron a citar las selecciones juveniles españoles, e incluso disputó algunos partidos. La cuestión fue que sus viajes a Brasil lo hicieron sentir una conexión especial y, al final, se decidió por el scratch: «Él jugaba con España y yo, mientras tanto, estaba de vacaciones en Brasil con nuestra madre. Pasé mucho tiempo ahí. Pero para Thiago fue un proceso claro, sobre todo porque vivió cosas hermosas con España. Fue muy claro. Y por mi parte, mi sentimiento era más brasileño».
Entre lesiones, ninguno ha podido tener la continuidad internacional que les gustaría. Aunque es claro que Thiago ya es un jugador clave y se espera que sea uno de los referentes en el proceso rumbo a Qatar 2022. Rafinha fue parte del histórico olímpico en Río 2016, pero ha ido poco al combinado absoluto. Quizá, en el PSG, consiga llenarle el ojo a Tite.
Dato Invicto. Mazinho, el padre de los Alcántara, representó a Brasil entre 1989 y 1994. Fue campeón de América y campeón del mundo. Disputó 35 juegos.
¿Sabías que…? Thiago Alcántara estuvo en el XI ideal de la UEFA Champions League 2019/20.