Javier Mascherano agradece y toma con mucho humor los elogios que ha recibido tras su gran actuación en Brasil 2014. El jugador del FC Barcelona comenta que no se siente muy cómodo cuando un solo jugador es quien acapara el reconocimiento de todo un grupo.
«Yo no soy Rambo, ni San Martín, no me adjudico nada de lo que se dice. Lo tomo con humor, pero con vergüenza. Los elogios no me gustan, me hacen sentir mal», dijo Mascherano.
El mediocampista argentino le ha dejado en claro a todos sus compañeros que el domingo jugarán en el partido de sus vidas. Más allá del resultado, lo que le interesa a Javier es que su equipo juegue con mística y sin temor.
«Quiero ganar la final y ser campeón del mundo, pero me importa que seamos nosotros y que juguemos sin ningún complejo ni temor», explicó el ’14’ de la Selección de Argentina.
Para finalizar la entrevista que sostuvo con el diario Olé, Mascherano habló sobre el rol de su compañero Lionel Messi durante el Mundial.
«Leo arrancó el motor de este equipo en los primeros partidos y después se adaptó a lo que el conjunto necesitaba. En algunos partidos tuvo que sacrificarse muchísimo más de lo que nosotros hubiésemos querido, pero lo hizo por el bien de todos», finalizó el jugador del FC Barcelona.