Alemania y Argentina se han enfrentado 20 veces en toda la historia, con ventaja para el seleccionado sudamericano que consiguió 9 victorias, selló 5 empates y obtuvo 6 derrotas. La tercera final mundialista entre alemanes y argentinos ha llegado.
En unas horas se dará el séptimo enfrentamiento en Copas del Mundo entre argentinos y alemanes. Los europeos y sudamericanos se han visto las caras en 2 finales, 2 partidos cuartos de final y 2 encuentros de fase de grupos. Alemania ha conseguido 3 victorias, 2 empates y 1 derrota.
Les dejamos un breve recuento de los 6 partidos mundialistas entre Alemania y Argentina.
Suiza 1958: Argentina 1-3 Alemania. Partido de fase de grupos. Uno de los peores mundiales en la historia de la Selección de Argentina (no pasó de la fase de grupos). Alemania terminaría en la cuarta posición.
Inglaterra 1966: Argentina 0-0 Alemania. Partido de la fase de grupos. Ambos clasificaron a la siguiente ronda. Argentina fue eliminado en Cuartos de Final por Inglaterra y Alemania terminó el certamen como subcampeón.
México 1986: Argentina 3-2 Alemania. La primera final mundialista de la historia entre alemanes y argentinos. La histórica Argentina de Diego Armando Maradona venció a la Alemania de Andreas Brehme. Karl-Heinz Rummenigge y Lothar Matthaeus. Bilardo le ganó el primer duelo a Franz Beckenbauer.
Italia 1990: Argentina 0-1 Alemania. Segunda final mundialista entre alemanes y argentinos. Gracias al señalamiento de un polémico penal, convertido por Andreas Brehme, Alemania obtuvo se tercer título mundial y la revancha ante la Argentina de Maradona.
Alemania 2006: Argentina 1-1 Alemania (Penales: 2-4). Partido de Cuartos de final. Una de las derrotas más dolorosas para Argentina en los últimos mundiales. Alemania les empató a 10 minutos del final y los sacó en penales. Jens Lehmann fue la figura.
Sudáfrica 2010: Argentina 0-4 Alemania. Segundo partido en Cuartos de final. Una de las goleadas mundialistas más escandalosas de la historia. El equipo dirigido por Diego Armando Maradona no metió ni las manos. Miroslav Klose fue figura.
