Corría el minuto 88 cuando Joachim Löw se decidió. El momento de Mario en la final de la Copa del Mundo había llegado. El partido estaba a punto de irse a tiempos extra y Joachim sabía que necesitaría a hombres frescos para tratar de liquidarlo antes de la tanda de penales. Podolski, considerando su experiencia, parecía ser el indicado, pero el DT alemán se decantó por Mario. Sí, el futbolista que únicamente jugó 46 minutos ante Argelia, 7 minutos ante Francia y no jugó ante Brasil, era el elegido.
Mario entró de cambio por el máximo goleador histórico de las Copas del Mundo, Miroslav Klose. La leyenda de los Mundiales lo miró a los ojos, le tocó el rostro y le dio un grito de aliento. Mario estaba listo. El futbolista del Bayer Munich dejó el nerviosismo en su primer toque de balón, el joven de 22 años no podía creer que el sueño de toda su vida se estaba cumpliendo. En 2002, cuando Alemania perdió la final ante Brasil, Mario sufrió la derrota como pocos al lado de su hermano, 12 años después, Mario estaba en el mítico Maracaná, disputando la final de un Mundial ante Argentina.
Götze no tocó mucho el esférico en el 1TE. Es más, era tanta la tensión del partido que pocos se percataron de su presencia. El 2TE llegó, los últimos 15 minutos de la Copa del Mundo se disputaban. El momento de Mario estaba por llegar. Al 113′, Schürrle mandó un centro al corazón del área argentina, Götze controló el balón con el pecho con muchísima sutileza y, sin que éste cayera, sacó un disparo ante un Romero que salía a toda prisa.
Mario patinó, se dio la vuelta y comenzó a correr sin dirección fija. Su desorientación e incredulidad se veían hasta Memmingen, Alemania. Mario no lo podía creer, había marcado su segundo gol mundialista, había marcado un gol en la final de una Copa del Mundo, había marcado el tanto del Mundial.
Castro en el 30, Schiavio en el 34, Piola en el 38, Ghiggia en el 50, Rahn en el 54, Pelé en el 58, Vava en el 62, Hurst en el 66, Pelé en el 70, Müller en el 74, Kempes en el 78, Rossi en el 82, Burruchaga en el 86, Brehme en el 90, Dunga en el 94, Zidane en el 98, Ronaldo en el 2002, Grosso en el 2006, Iniesta en el 2010 y GÖTZE EN 2014. El gol del Mundial.