Ansioso, feliz y con muchas ganas de debutar con el FC Barcelona, Luis Suárez fue entrevistado por la revista oficial del club catalán. El delantero charrúa regaló declaraciones muy interesantes de lo que ha sido su carrera como futbolista y lo que espera en su etapa como jugador del Barça.
Ansioso por debutar. «Los últimos partidos en los que he ido a ver a los compañeros he notado cómo crece la ansiedad de querer jugar y de querer ayudar, de por lo menos estar a disposición del entrenador. Lo que me toca ahora es animarles, estar a su lado y esperar, porque ya no queda nada. Se pasa mal por la impotencia de no poder ayudar».
Complicados 4 meses de sanción. «Sobre todo los primeros dos meses, cuando no me sentía jugador de fútbol. Eso fue lo peor, porque uno comete errores y aceptarlo siempre es bueno, pero lo que más te indigna es no sentirte profesional, no sentirte un trabajador más, como todos los jugadores, eso es lo que más daño me hacía».
Anhelado debut. «Todavía no me doy cuenta, es como que todavía no caigo en la realidad. Jugué 15 minutos en el Gamper y sinceramente, me sentí un invitado. No me sentí realmente jugador del Barça. En el Gamper acababa de llegar, me sentía un poco nervioso. Imagino lo que será vestir la camiseta, estar con los compañeros en el vestuario antes del partido, vistiéndome para jugar, y justamente se da la casualidad de que todo esto pasará en el estadio que es. Tengo muchas ganas de vivir esta experiencia».
¿Debut contra el Real Madrid? «Nunca se sabe, pero soy de los que piensan que las cosas pasan por algo y que si con los 19 equipos que hay, justo tengo que volver contra el Real Madrid en el Bernabéu, por algo será».
Bota de Oro. «Los logros personales son bienvenidos y te alegran, porque es un reconocimiento del buen trabajo que estás haciendo, pero me gusta más priorizar el colectivo y el año pasado estuvimos con el Liverpool a punto de ganar la Premier, lo que habría sido espectacular. Lo que valoro es el trabajo que hizo todo el equipo, haberme perdido seis partidos y haber marcado esos goles en la Premier, sin tirar penaltis… La verdad es que me dejó muy contento porque si no hubiera tenido la actitud y la mentalidad de querer llevar el equipo adelante tampoco habría triunfado el Liverpool de esta manera. El hecho de volver a la Champions también era un objetivo que tenía yo en mente».
Ajax. «Son muchas coincidencias, ¡y además en Amsterdam! La verdad es que volver después de tanto tiempo, y también volver a jugar la Champions contra el primer equipo con el que jugué la Champions, que fue el Ajax…, y hacerlo con el equipo con el que he soñado toda mi vida, que es el Barcelona… ¡Sí, es el destino de nuevo! Será un partido muy especial para mí, también volver a reencontrarme con la gente del club, con toda la afición, todo eso me encanta».
Capitán joven. «Fui al Ajax en 2007 y en 2009 era capitán. Al entrenador (Martin Jol) le gustaba mi forma de ser y creyó que sería beneficioso para el equipo. También el hecho de sentirme responsable en un equipo como el Ajax te motivaba más. El tema del idioma pensé que sería una barrera pero al entrenador no le pasó eso por la cabeza, lo único que me dijo es que tenía que tirar del equipo e intentar dar lo mejor. Para mí era algo único, algo histórico en esta época, con la edad que tenía, ser capitán de un equipo como el Ajax tan grande a nivel mundial».
Goleador y asistente. «Al delantero lo que más le gusta es hacer goles y eso también depende de la calidad de uno, de la confianza, del instinto que tengas en ese momento, el oportunismo, pero también el delantero es compañero, y en mi caso me gusta hacer una bonita jugada y dar el pase de gol a otro. Aunque haya gente que no se lo pueda creer, también hay delanteros a los que nos gusta dar un gol a un compañero que está mejor situado. En los equipos en los que he estado he tratado de ayudar tanto con goles como con asistencias».
Delantero con rotación. «Hay algunos que me consideran delantero centro y otros, delantero, porque las veces que he jugado como delantero centro no me puedo quedar en la posición de 9, siempre me muevo constantemente y no me gusta estar quieto. Cuando tenemos la pelota me muevo por todo el frente de ataque, prefiero no estar solo dentro del área. Pero bueno, hay que estar atento a lo que quiera el entrenador, a lo que pida e intentar ayudar al equipo en lo que pueda».
MSN. «Lo que pienso ahora es en volver a jugar y ayudar al equipo en lo que pueda, a hacer méritos para poder estar en el 11 y demostrar al entrenador que uno viene aquí a aportar algo más para que el Barça consiga títulos, y luego la calidad de los jugadores que hay es increíble, es admirable».
Calidad de plantel. «Mirabas los partidos y ya veías la calidad de los jugadores, en los entrenamientos lo que haces es confirmar lo que ves en los partidos. Ver los pases que hacen Leo, Neymar, Xavi, Iniesta…, todos jugadores de gran calidad y ves que es imposible hacer un pase y ellos lo hacen, te deja parado. Compartir con ellos los entrenamientos y el día a día es espectacular».
Trabajo en el tiempo de suspensión. «Estaba en un gimnasio con un preparador físico. Trabajábamos en un cuadrado de diez por diez y era difícil y complicado evitar que la gente te viera y te hiciera alguna foto. Era difícil de llevar, pero también era consciente de que estaba trabajando por mí mismo, que venía de una operación de menisco antes del Mundial de la que me había recuperado pero no estaba al cien por cien de forma para hacer trabajos exigentes. Primero había que preparar la rodilla y luego tratar de mejorar algo físicamente, porque no podía hacer mucho más. Podía salir a correr pero tenía que tratar de evitar algunas cosas y la mentalidad era la de trabajar duro para que cuando me tocara entrenar con los compañeros pudiera estar a su nivel».
Ganas de triunfar, ganas de títulos. «Lo único que puedo decir es que llego con ganas de triunfar en el Barça, que vengo con ganas de ganar títulos, algunos que no he ganado en Europa, y que voy a dar el máximo en cada partido. No vengo a regalar nada, porque nunca me han regalado nada en mi vida, y ahora que tengo la oportunidad de jugar en el equipo en el que he querido hacerlo siempre, no lo desperdiciaré. Quiero demostrar a la gente que quiero triunfar aquí en el Barça y ayudar a los compañeros tanto como pueda».
Inicios con Nacional. «Los inicios fueron duros. En un momento dado, en el Nacional de Montevideo, cuando tenía 14 años, me dijeron que no contarían más conmigo, que ese año no había cumplido con las expectativas que tenía el club. Las malas compañías no eran beneficiosas para mí y tenía que alejarme de eso y concentrarme en el fútbol. Hubo gente en el Nacional que me ayudó a tener una última oportunidad y también cuando conocí a Sofía (actual esposa) ella me guió por el buen camino y fue beneficioso para mi carrera».
Disculpas por indisciplinas. «Cuando uno pide perdón es porque se arrepiente de lo que hizo. Perdón implica arrepentimiento. También a veces se me ha juzgado por cosas que no fueron ciertas, como el tema del racismo. Me acusaron sin ninguna prueba, y eso fue lo que más me dolió. El resto fueron actos en que yo me equivoqué, yo lo acepté y pedí perdón, pero eso del racismo, que me acusen sin ninguna prueba, eso me dolió».