No podíamos dejar pasar el cumpleaños de uno de los mejores guardametas en la historia del deporte. Un revolucionario del balompié, un futbolista adelantado a su época, un todológo. Verlo en el terreno de juego como portero o delantero era espectáculo garantizado. Orgullo mexicano. El gran Jorge Campos.
Les dejamos algunos datos, anécdotas y curiosidades del mítico cancerbero azteca.
Familia. Hijo de Álvaro Campos González y Lucina Navarreta. Nació el 15 de octubre de 1966 en Acapulco, Guerrero.
Niño hiperactivo. Necesitaba mantenerse ocupado. Disfrutaba mucho jugar fútbol en la playa o pasear en caballo con su abuelo.
Abuelos. Antonio y Juan, ambos muy importantes en su formación. «Me enseñaron cosas que nunca habría aprendido en México, me enseñaron a ordeñar, a lazar caballos. Me enseñaron la vida de un rancho», cuenta Campos.
Sueño cuando era niño. Estudiar una carrera, tener un rancho y ser veterinario. «Quería tener contacto con los animales, así que mis opciones eran un rancho o ser veterinario. Mi sueño no era ser futbolista profesional, el fútbol vino después», relata Jorge.
Perdió a su hermana. Tenía 8 años cuando su hermana Susana, de 19 años, perdió la vida en un accidente automovilístico. A Jorge no le gusta hablar del tema.
Triunfos dedicados a su hermana. «Siempre pienso en ella, antes de cada partido lo hacía. Siempre pienso en ella, en mis abuelos, los que se han ido. Siempre los tengo presentes».
Ídolos. Hugo Sánchez y Héctor Miguel Zelada.
Portero y delantero. Jugaba en ambas posiciones desde que era niño. Su hermano lo entrenaba como delantero y su abuelo como portero.
Luis Estrada. El descubridor de Campos. Lo vio, le hizo saber que tenía calidad y le dijo lo lejos que podía llegar. «Me dijo que iba que él me iba a entrenar y que iba a llegar a Primera División, yo le dije que estaba bien, pero realmente no lo creía, nunca me imaginé. Yo seguí jugando y estudiando, pero él siempre me dio consejos».
Luis Miguel Mejía Barón y llegada a Pumas UNAM. En un partido entre Inter de Acapulco y Pumas UNAM, Mejía Barón lo descubre y lo invitó a probarse a Pumas. Jorge tenía 17 años de edad. «Tampoco creía y mi papá no me dejaba porque quería que acabara la preparatoria. Mejía Barón fue a buscarnos 3 o 4 veces y no nos encontraba. Mi papá no quería realmente. Cuando terminé la prepa me decidí y fui con Pumas», recuerda el hoy comentarista deportivo.
Estudios y fútbol. Combinaba las dos cosas. «Aunque digan que no, sí se puede», asegura Jorge.
Portero delantero, hacía de todo. «En reservas jugaba como portero, después me hicieron delantero. Los que confiaban en mi como portero eran Mejía Barón y Luis Estrada, ambos me decían que llegaría a la selección como portero».
Pumas UNAM. Se sumó al primer equipo en 1988. su primer temporada como titular recurrente fue la 1989-90 y jugó como delantero, en esa campaña marcó 21 goles (14 en Liga y 7 en Concacaf).
Portero de Pumas UNAM. En 1990 la portería se abrió por la marcha de Adolfo Ríos. Campos tomó el puesto, pero nunca cerró su faceta como delantero. Mejía Barón solía utilizarlo como delantero en los segundos tiempos cuando buscaba romper candados defensivos.
Portero libero. Siempre jugaba adelantado y cuando tenía la oportunidad de salir rápido lo hacía conduciendo el balón. Hoy nos sorprendemos con Neuer, quien al lado de Campos no es más que un chascarrillo.
El Loco Gatti mexicano. El entrenador campeón del mundo, César Luis Menotti, declaró que Jorge Campos era el nuevo Gatti. «Es como Gatti, es el portero del siglo XXI».
Selección de México. Lo debutó Menotti en 1991. Estuvo en 3 Mundiales, 2 Copas Confederaciones, 3 Copas América y 1 Juegos Panamericanos. Ganó 4 títulos.
Equipos. Jugó para Pumas UNAM, Atlante, LA Galaxy, Cruz Azul, Chicago Fire, Tigres UANL y Puebla.
Ídolo. Uno de los pocos jugadores que nunca niega un autógrafo o una foto. En la década de los 90’s no había futbolista más famoso que él.
Uniformes exóticos. Jorge se caracterizó por sus exóticos uniformes, él mismo los diseñaba. Se inspiró en las tablas de surf que utilizaba cuando iba a Acapulco.
Foto previa a los partidos. Siempre se paraba sobre el balón para parecer más alto. Lo hacía a nivel clubes y a nivel internacional.
Romario. El brasileño expresó su admiración por el arquero mexicano. En alguna ocasión, el genio brasileño se comió la finta de Campos en la que simulaba dejarse caer en un mano a mano para después lanzarse con todo.
Secuestro a su padre. Secuestraron a su padre en febrero de 1999 mientras estaba concentrado con la Selección de México. Los secuestradores pedían 1 millón de dólares. Jorge tuvo que abandonar la concentración para comenzar las negociaciones. Sin dar muchos detalles, el padre fue liberado días después, resultando ileso.
Cuarto portero más goleador en la historia del fútbol. Marcó 40 goles a lo largo de su carrera. Solamente lo superan Ceni (121), Chilavert (62) e Higuita (41).
Nike. Imagen de grandes marcas. Compartió con comercial de Nike con jugadores como Éric Cantona, Alessandro Del Piero, Ronaldo, Paolo Maldini y Luís Figo.
Goleador. El portero que dejaba los guantes y se cambiaba el uniforme por uno de jugador de cambo para lanzarse al ataque. Lo hizo a nivel clubes.
Apodos. Brody, Chapulín, Inmortal, George Fields y Jorginho Campos.
Humilde. Quien lo conoce desde que era joven asegura que no ha cambiado nada. «Pienso que esto es pasajero, así que lo disfruto. No tengo porque sentirme más que nadie, soy una persona como cualquier otra», dice.
Mejor portero de México. Ganó 5 Citlali como Mejor Portero de la Primera División de México.
Ricardo Espadas. Personaje de la serie Supercampeones inspirado en Jorge Campos.
Peter Schmeichel. Reconoce a Campos como uno de los mejores arqueros de la historia.
Auxiliar técnico. Fue auxiliar técnico de La Volpe en Alemania 2006
Figura mundial. No hay leyenda del fútbol que no lo reconozca. Cuando asiste a partidos como comentarista de TV se le puede ver saludando a figuras del combinado rival.
TvAzteca. Uno de las comentaristas deportivos más escuchado de los últimos años. Junto a Martinoli y Luis García ha formado un tridente que ha causado sensación entre la afición mexicana.