Lo presumió en Instagram y lo mostró el sábado tras convertirle un tanto al Caen en el Parc des Princes. Zlatan Ibrahimovic ha vuelto a tatuarse y, al parecer, está muy orgulloso del mismo, ya que le ha dado por exhibirlo.
Ibra se tatuó Abdullah, nombre de origen árabe que significa ‘servidor de Dios’ o ‘siervo de Alá’. Se sabe que su padre era musulman y su madre católica, pero él, según varios reportes de la prensa sueca, se habría declarado ateo, por lo que el significado puede estar lejos del sentido religioso que se le podría dar.
El capitán y máximo goleador de la Selección de Suecia ha tapizado casi por completo su espalda: unos dragones, un as de corazones, una pluma india, símbolos mayas y el nombre de su padre son algunos de los tatuajes que lleva.