El 1 de julio de 2010, un delantero polaco de apenas 21 años de edad, arribaba a la ciudad de Dortmund, ¿su nombre? Robert Lewandowski. El nacido en la ciudad de Warsaw llegó al Signal Iduna Park tras ser la sensación del fútbol polaco en las últimas temporadas.
Borussia Dortmund, amante de los jugadores de bajo perfil y de ligas en la que pocos clubes se fijan, fichó a Robert por 4.75 millones de euros. En su primera camapaña como jugador del conjunto amarillo, su rol era secundario. Marcó 9 goles y se ganó el apodo falla goles, por algunas oportunidades clarísimas que dejó ir. Sin embargo, Jürgen Klopp tenía una gran confianza en él.
El estratega alemán le dio la oportunidad de ser titular y el artillero polaco no desaprovechó. Desde aquel momento, el futbolista nacido en 1988 no se cansó de marcar goles: 103 goles en los 187 partidos que disputó con la camiseta del Borussia Dortmund.
Sus grandes números hicieron que Bayern Munich se interesara en sus servicios y finalmente, en enero de 2014, decidió unirse a la entidad bávara como agente libre. En su primer temporada con Bayern Munich, Robert ha disputado tres partidos contra Borussia Dortmund y, haciendo efectiva la infalible Ley del ex, ha visto la puerta en dos ocasiones. Su primer gol contra el conjunto amarillo lo hizo en Allianz Arena y, aunque no lo festejó, se le pudo ver con una sonrisa en el rostro.
Las cosas fueron diferentes cuando perforó la portería de Roman Weidenfeller en Signal Iduna Park. Aprovechó un rebote tras un disparo de Müller, festejó con sus compañeros y rápidamente regresó a su posición.