La Copa del Mundo que conquistó la Selección Femenil de Estados Unidos en 1999 marcó a una generación entera. Alex Patricia Morgan, una niña atlética que aún no definía bien cuál era el deporte en el que quería concentrarse totalmente, terminó decantándose por el fútbol tras esa Copa. Con Mia Hamm, Kristine Lilly, la chica norteamericana comenzó su camino por el fútbol.
De niña, lo había jugado ocasionalmente. Pero fue hasta que cumplió 14 años de edad cuando comenzó a disfrutarlo como nunca. Se inició en un equipo de manera formal y, poco a poco, fue evolucionando. En principio, no había mucha diferencia con respecto a sus compañeros, pero se comprometió tanto que terminó siendo la mejor de sus equipos escolares.
Con 17 años de edad, inició su andanza las selecciones juveniles de Estados Unidos y, pronto, dio el salto a la Selección absoluta de Estados Unidos. Su carrera a nivel internacional ha sido brillantísima. Con apenas 26 años de edad, ha marcado 52 goles, ha dado 32 asistencias y ha disputado 91 partidos con su selección.
Además, en apenas 5 años representando a USA ha cumplido sus dos grandes sueños: SER MEDALLISTA EN LOS JUEGOS OLÍMPICOS Y GANAR UNA COPA DEL MUNDO.
