JAJA, sabemos que el título suena a broma, pero no lo es. En sus vacaciones, el delantero polaco del Bayern Munich, Robert Lewandowski, pasó unos días en un pequeño pueblo de Polonia llamado Stanzlewen. Salir de compras en el pueblito era un problema, ya que las distancias eran considerables para ir caminando.
La ‘problemática’ se agravó cuando la señora Lewandowski, Anna Stachurska, tenía antojo de pan, así que Robert se las tuvo que ingeniar… Según información del diario Bild, el capitán de la Selección de Polonia alquiló un helicóptero por 5,000 euros para ir al pueblo de al lado (30 km de distancia) para satisfacer los deseos de su esposa.
La verdad no lo culpamos, no debe ser muy bueno tener enojada, en un pequeño pueblo, a una medallista mundial de kárate, JAJA.