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Luego de haber retenido su título de peso gallo de la UFC por la victoria conseguida ante Bethe Correia en apenas 34 segundos, Ronda Rousey aprovechó su estancia en Brasil para conocer el Maracaná y decidió asistir al partido del máximo circuito brasileño entre Flamengo y Santos.
Rousey, que portó una camiseta del Flamengo, causó sensación entre los aficionados y se dio tiempo de tomarse algunas fotografías y firmar autógrafos.
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Si no vieron la pelea de la que hablamos al principio, aquí les dejamos el extenso resumen:
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