En 2007, Rafael Benítez lo sacó de la suplencia del West Ham. Juntos trabajaron durante casi 5 años y, aunque los títulos no llegaron, lograron forjar una grandísima relación jugador-entrenador. En estos momentos, son rivales, ya que uno defiende los colores del FC Barcelona y el otro del Real Madrid, pero siguen teniendo contacto. Mascherano siempre le estará agradecido al hoy entrenador del club culé.
«Benítez me saco de un pozo ciego a 20 metros bajo tierra y me llevó a lo más alto. Desde que no estamos en el mismo equipo mantenemos el contacto. Es una grandísima persona y un técnico muy docente, con el que puedes aprender mucho si realmente lo quieres. Hablé con Rafa cuando entrenaba al Napoles y ahora lo hacemos un poquito menos por circunstancias lógicas. Pero se lo agradezco todo», contó Mascherano en entrevista para Panenka.
Rafael Benítez, por su parte, asegura que la rivalidad de los clubes a los que representan no repercuten en el respeto y afecto que se tienen. Agregó que en sus días con el Napoli e Internazionale estuvo cerca de ficharlo.
«Hace poco hablé con él y los dos sabemos que somos rivales, pero eso no repercute en el respeto y afecto que nos tenemos. Estando en el Liverpool, me fui a hablar con él y le convencí hablándole de fútbol con las piedras de un jarrón y un centro de mesa. Por entonces él no jugaba ni en el reserva del West Ham, algo increíble. Estuve a punto de ficharlo para el Nápoles y para el Inter», declaró en entrevista para Al Primer Toque.
Lo hemos dicho siempre: LA RIVALIDAD SE QUEDA EN LA CANCHA.