Durante el partido no se cansó de repartir patadas y hacerse de palabras con los jugadores del FC Barcelona. La sanción con la que tuvo que pagar fue una expulsión a quince minutos del final luego de haber insultado a Luis Suárez en la cara del árbitro central. Pape Diop salió molestó de la cancha del Camp Nou y, tras el encuentro, compartió sus impresiones.
El senegalés no quiso recordar lo le que dijo a Luis Suáez previo a ver la tarjeta roja y aseguró que si hubieran querido, los jugadores del FC Barcelona habrían terminado en una camilla: «No pueden decir que somos violentos. No se ha visto sangre. Si hubieramos querido los del Barça salen en camilla».
Defiende el juego del Espanyol ante FC Barcelona: «Si jugamos contra equipos como el Barça y no podemos ponerle intensidad porque nos sacan tarjetas pues nada».
¿Encontranzo con Suárez? «No quiero decir lo que dije (a Luis Suárez) pero no es la primera vez que dos jugadores se dicen cosas feas».
Confia en la remontada: «Somos el Espanyol, en nuestro campo tenemos que salir fuertes. Con esa afición que tenemos no es imposible».
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