No está viviendo un gran momento, pero es, sin lugar a dudas, uno de los mejores futbolistas del mundo. Debutó en Lille, explotó en Chelsea y ha sido pieza importante de la generación dorada de la Selección de Bélgica. Desequilibrio, velocidad, juego entre líneas golpeo de balón y gran toma de decisiones. Él es EDEN HAZARD.
1. Nacido para jugar fútbol. La familia Hazard lleva el fútbol en la sangre. El padre de Eden, Thierry, jugó semiprofesionalmente en RAA Louviéroise, mientras que su madre, Carine, jugó en la Primera División Femenil de Bélgica hasta que se embarazó de Eden. «Yo estaba en el estómago de mi madre cuando ella todavía jugaba. Tenía tres meses de embarazo cuando dejó de jugar profesionalmente», contó Hazard hace unos años en The Independent.
2. La dinastía de los Hazard. Los cuatro hijos de Thierry y Carine se inclinaron por el fútbol. Eden, 25, es referente de la Selección de Bélgica y del Chelsea. Thorgan, 22, juega con el Borussia Mönchengladbach. Kylian, 20, es volante ofensivo y juega en el Újpest de Hungría. Y Ethan Hazard, el menor de todos, apenas comienza con su carrera en el AFC Tubize, mismo equipo en el que jugaron todos sus hermanos cuando eran niños. «Mis hijos ya comienzan a jugar fútbol», bromea Eden al ser cuestionado sobre el tema.
3. Una joya del fútbol belga. Eden se incorporó a las categorías inferiores del Lille en 2005 tras haber militado en el Royal Stade Brainois y el Tubize. Desde su llegada al fútbol francés demostró que era un jugador distinto. Sus entrenadores en inferiores lo definían como un jugador desequilibrante, veloz, gran definidor y muy inteligente. Uno de los talentos más prometedores del club.
4. Ídolo del Lille. Rudi García, actual DT de AS Roma, fue quien lo ascendió definitivamente al primer equipo del Lille. Debutó con 16 años de edad y se hizo inamovible en el curso 2007/08. Fue campeón de liga, campeón de Copa, dos veces mejor jugador joven de la temporada, dos veces mejor jugador de la temporada y tres veces parte del XI ideal de la Ligue 1. Hizo 50 goles y dio más de 45 pases decisivos en 194 partidos.
5. Transferencia récord. Chelsea lo fichó en 2012, cuando apenas tenía 21 años de edad por 40 millones de euros. Eden se convirtió en la venta más cara en toda la historia del Lille. A su llegada su objetivo era claro: «vengo al Chelsea para ganar más títulos. Estoy viviendo un sueño».
6. El niño que impresionó a Zinedine Zidane. «Hazard es el crack del futuro: es muy bueno y va a serlo aún más. Lo llevaría al Madrid con los ojos cerrados», decía Zidane cuando ejercía de asesor de Florentino Pérez. Curiosamente, Zizou fue el ídolo de la infancia de Eden: «Me gusta llevar el número 10 como él, como Zizou lo hacía con Francia. Siempre fue mi ídolo», cuenta Hazard.
7. El Messi del Chelsea. En la temporada 2014/15 la rompió en grande. Campeón de la Premier League y campeón de la Capital One Cup. Además, fue reconocido como el Mejor Jugador de la Premier, formó parte del XI ideal de la Premier y se llevó el reconocimiento como Mejor Jugador del Chelsea del curso. «Es tan determinante en Chelsea como Messi para el FC Barcelona», dijo hace unos meses Cesc.
8. Proceso completísimo con la Selección de Bélgica. Jugó en la U17, U18, U19 y absoluta. Su primer partido como internacional absoluto lo tuvo cuando apenas tenías 17 años y 316 días. Hazard ya sabe lo que es disputar un Mundial y ha sido el comandante del combinado en los últimos años. Ser el ’10’ de su país, otro sueño que cumplió.
9. Sus jugadores favoritos. En su infancia y adolescencia confiesa que veía muchos vídeos de Zinedine Zidane, Thierry Henry, Ronaldinho, Robinho y Juan Román Riquelme. Eden asegura que siempre tuvo una debilidad por el fútbol sudamericano. ¿Referentes actuales? «Los dos extraterrestes, Cristiano y Messi. También están Zlatan, Ribéry y Robben».
10. Pasatiempos. Gran aficionado del FIFA y ahora se da el lujo de verse en la portada cada vez que lo juega. Tiene de clientes a sus compañeros del Chelsea y hasta le ha ganado a varios aficionados en convivencias organizadas por el conjunto de Stamford Bridge. Otro de los secretillos del crack belga es su afición por el Anime. Es muy fan de Naruto.