El estratega asturiano Luis Enrique concedió una entrevista personal a una alumna del curso de periodismo para jóvenes que organiza Down Catalunya. El actual director técnico del FC Barcelona repasó sus días como futbolista y comparó sus días con pantalones cortos con los de entrenador.
El multicampeón DT confiesa que el fútbol es mucho mejor como jugador que como estratega: «¿Ser entrenador? Ha sido una experiencia positiva, pero también ha tenido sus momentos delicados y difíciles. Jugador quería ser desde que era niño, lo tenía claro. Pero entrenador no lo pensé hasta que dejé el fútbol con 34 años. Era una posibilidad, pero que también no lo tenía muy claro. Y una vez que me hice entrenador, como a los 37 o 38, ha habido momentos en los que me ha gustado mucho y otros en los que he sufrido mucho. ¿Por qué? Porque soy una persona a la que le gusta tener todo controlado y, en el fútbol, es algo que no se puede. Con el tiempo he ido mejorando estas cosas, pero el fútbol es un deporte complicado. El fútbol es mucho mejor como jugador que como entrenador».
El deporte es fundamental en la formación: «Recuerdo haber pasado una grandísima infancia, una grandísima juventud… El deporte te enseña muchos valores. Te enseña a ser humilde. Te enseña a gestionar derrotas, a gestionar victorias. Te ayuda a relacionarte con la gente. A ser solidario. Te enseña valores muy importantes que son básicos para la gente joven».
¿Más presión en AS Roma o presión en el FC Barcelona? «La presión como entrenador siempre está y, luego, la presión que me autoimpongo es la que más siento yo. Me hace daño por querer ser perfeccionista, debería ser menor. Si hablamos de medios de comunicaicón, en el FC Barcelona hay mucha más presión que en cualquier otro equipo. Y aquí estás siempre a recibir muchas más críticas».
Orgulloso de su carrera: «Disfruté muchísimo de mi carrera profesional, conquisté los títulos que pude y jugué muchos más partidos de los que imaginé. Estoy orgulloso».
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