En la pasada final del Mundial de Clubes, River Plate se midió ante el FC Barcelona. El club argentino volvió a Japón tras 19 años de ausencia y tuvo la oportunidad de medirse al mejor equipo dela época. Para Marcelo Barovero, capitán y referente de River, fue un partido especial, ya que su hijo siempre le preguntaba cuando le tocaría enfrentarse a Lionel Messi.
Barovero, en charla con El Gráfico, confesó que cuando le atajó un disparo a Messi cumplió el sueño de su hijo:«Siempre veíamos como algo inalcanzable enfrentar al Barcelona. No sólo mi hijo, yo también, y Agustín me decía seguido ‘¿Y vos cuándo vas a jugar contra el Barcelona? ¿Y vos cuándo le vas a atajar un tiro a Messi?’ Se dio esa jugada, me acordé y se lo dije. Le cumplí el sueño a mi hijo»
Messi tuvo un gesto que nunca olvidará Barovero: «Hubo mucho respeto de todo el equipo del Barcelona. Cuando terminó el partido, que me acerqué a felicitarlos. Le pedí a Lionel la camiseta, pero se habían anticipado, llegué tarde. Y un rato después, ya en el pasillo que comunicaba los vestuarios, que estaban muy pegados, le pedí si me cambiaba el buzo de Bravo. Le di el mío y, a los pocos minutos, llegó con el buzo de Bravo y con unos botines en la mano. ‘Estos son para tu hijo’, me dijo Lio. Eran los botines de él. Me quedé mudo de admiración. Jamás me imaginé que iba a hacer eso. Un gesto del más grande. Le mandé una foto de los botines a Agustín, no lo podía creer. Más aún cuando llegué y se los di. Me pidió que los guarde con mis cosas, en el museo que tengo».
El ídolo de River asegura que, pese a la derrota, no quería que el partido ante FC Barcelona terminara: «Esa final fue uno de los pocos partidos que no quería que terminaran. La verdad que cada vez que me pongo a pensar en lo que fue, en el lugar que estuvimos, me agarra nostalgia. Una mezcla de nostalgia, orgullo y alegría de haber llegado ahí, no sé si por lejanía, por lo que cuesta llegar, porque es lo que uno soñó desde chico».