FC Barcelona no pudo con el Atlético de Madrid y ha visto interrumpido su sueño de convertirse en el primer equipo en ganar dos UEFA Champions League de manera consecutivos. Los de Simeone, que sufrieron muchísimo para echar al PSV en Octavos, se graduaron como la mejor defensiva de Europa y siguen soñando con la final de Milán.
✓ Justo semifinalista. Explotar fortalezas y ocultar al máximo debilidades, la clave. Atlético de Madrid no puede apostar de un juego de ida/vuelta ante FC Barcelona, así que había que defenderse de forma extraordinaria y buscar un juego directo. La idea era práctica: presionarlos en todo momento cuando atacaban y llegar rápido -y sin muchos toques- al arco de Marc-André ter Stegen. FC Barcelona fue amo del balón, pero Atlético fue el equipo contundente.
✓ Arbitraje. No lo queremos dar mucha importancia a este tema. Está clarísimo que el arbitraje fue terrible en toda la eliminatoria para ambos equipos. Se habla mucho del claro penal a favor del FC Barcelona que se terminó sancionado como tiro libre, pero si se habla de esa jugada también se tendrá que hablar de las rojas perdonadas al club catalán. El trabajo de los colegiados fue una burla, pero para ambos lados. Al final, Atleti avanzó de manera justa.
✓ Presión colchonera. Con la ventaja en el marcador, esperaron en su propio campo y buscaron la contra. Pese a que conocemos a la perfección del Atlético, es imposible no impresionarse ante la presión, escalonamientos y concentración de todos los jugadores del Atlético de Madrid. Los culés apenas tenían tiempo de recibir la redonda. Fue un trabajo bárbaro. Un esfuerzo mayúsculo que, en esta ocasión, tuvo el premio merecido.
✓ El músculo no está peleado con la claridad. Son los primeros en correr/presionar, pero no por eso son unos picapiedra. Gabi, Koke, Augusto Fernández y, sobre todo, Saúl entregaron un partido fantástico. Nunca se volvieron locos, rara vez perdieron la posición y, al frente, manejaron las transiciones con mucha inteligencia. Griezmann y la línea defensiva se llevan el crédito por los goles/ceros colgados, pero no dejemos de reconocer la labor del mediocampo.
✓ Antoine Griezmann y su explosión como futbolista. Desde su última temporada en la Real Sociedad dejó claro que iba camino a convertirse en un jugador TOP. Con Simeone, jugando como segundo delantero o centrodelantero, llegó su explosión absoluta. Por sus condiciones, creímos que le costaría adaptarse al esquema de Simeone, pero el argentino le convenció y lo ha convertido en uno de sus referentes. Con su velocidad y movimientos en ruptura, complicó en todo momento a la defensiva blaugrana. 54 goles en 99 partidos y, además, ha aparecido en momentos sumamente importantes. Que añito para el francés. De iniciarse como jugador de banda a ser un fantástico definidor. De ser rechazado por muchos clubes a ser un auténtico crack.
✓ Qué noche de Filipe Luis. Su impresionante carrera en la jugada del penal define lo que fue su partido. Defensivamente, rozó la perfección (pregúntenle a Messi, Dani Alves y Sergi Roberto). Se quejó -de manera entendible- tras la ida de la UCL, pero no se vino abajo y regaló una exhibición de antología. Nada como sentirse en casa, ¿verdad, Filipe?
✓ Diego Godín. En términos netamente defensivos, es el mejor central del planeta. No tenemos ninguna duda. Aparezca o no en los XI de la FIFA o UEFA.
✓ Lucas Hernández. 20 añitos. Y vaya eliminatoria. Una personalidad bárbara. En teoría es el cuarto central del equipo (Godín, Giménez y Savic estarían antes), terminó jugando y respondió en todo momento. Tendrá que cuidarse mucho JoséMa porque vimos a un Lucas decidido y convencido de su calidad. Central para seguir de cerca.
✓ Decepcionante FC Barcelona. Esa es la realidad: FC Barcelona decepcionó. Vimos a un equipo lento, indeciso y predecible. Tuvieron el balón, pero apenas y preocuparon el arquero Oblak. Por largos lapsos del partido parecía que no estaban conscientes de que se jugaban el boleto a las semifinales de la UEFA Champions League. Nuestra sensación es que no ‘murieron’ como lo tiene que hacer un grande. De todo el equipo, rescatamos la actitud de Javier Mascherano. El resto deberá dormir sabiendo que pudo hacer más en el Vicente Calderón.
✓ Patear de media distancia es válido. Al juego de posesión, le han añadido la contra. Ahora falta que le agreguen los disparos de media distancia. Era increíble ver a Busquets, Iniesta o Arda Turan ‘abrir el juego’ con jugadores que estaba bien marcados, cuando tenían espacios para probar al arco. Si te conocen tan bien, tienes que salir del script para poder sorprender. Los goles cuentan igual si se meten o no al área chica, FC Barcelona. Les avisamos.
✓ MSN. Desconectados. Cada uno jugó su partido. No tuvieron espacios para aprovechar su extraordinaria calidad individual y sus intentos de conexión fueron interrumpidos. El parón por fecha FIFA no les vino nada bien. Y, bueno, después están los temas extracancha (impuestos con Messi, contrato de Neymar y la persecución por agresiones a Suárez). A veces, lo olvidamos, pero los futbolistas son personas y cuando hay cosas ajenas al trabajo que realmente pegan, afecta tu rendimiento laboral. Le pasa a cualquiera. Por los últimos partidos, Messi no dejará de ser el mejor del mundo, Suárez no dejará de ser el mejor ‘9’ del mundo y Neymar no dejará de ser el mejor jugador joven del mundo, pero está claro que no aparecieron en un momento clave de la temporada.
✓ Lionel Messi y su poca influencia en el juego. Cinco partidos consecutivos sin marcar o asistir, cosa que no había pasado antes. De los tres de arriba es el que más intenta en zona de creación, pero le costó encontrar su espacio en el campo para marcar diferencia. Empezó en banda y se fue cargando hacia el centro, pero nada le resultó. Después de un fantástico arranque del 2016, vino el bajón en el mes en el que más le necesitaba su equipo. Entre que el equipo pasa un mal momento y la complicada situación extra cancha que está viviendo, Messi cayó en un bache en el que no se puede caer en meses definitivos.
✓ El Neymar menos decisivo del curso. Ante la baja de Messi por lesión, Neymar se agigantó. Anduvo bien después de la vuelta del argentino, pero se ha perdido en el último par de meses. No es el mismo. Está volviendo a caer fácil en el juego de los defensas y sigue evidenciando su falta de equilibrio emocional. Él con su juego, es el que debe desesperar a los defensores, no al revés.
✓ Atlético, el rival que nadie quiere. Así de fácil. Así de claro. Ninguno de los semifinalistas se quiere enfrentar al equipo de Simeone. Ayer comentamos que nos gustaría ver al Real Madrid ante el ganador de esta serie, y nos mantenemos. Pero también nos atraería mucho ver al Bayern de Pep ante el equipo rojiblanco. A ver qué nos trae el sorteo…