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AC Milan estuvo a nada de perder ante Carpi, equipo que ascendió a la Serie A en la presente temporada, en la cancha de San Siro. Afortunadamente para su causa, el portero de 17 años de edad, Gianluigi Donnarumma, volvió a demostrar sus extraordinarias condiciones en el arco y evitó que los rossoneros cosecharan un nuevo descalabro.
En el tiempo de compensación de la segunda mitad, Crimi le sacó la pelota a Montolivo, se enfiló al arco de Gianluigi y sacó un disparo que, parecía, terminaría al fondo del arco. Pero bueno, el grito de gol se ahogó por la fantástica mano que metió Donnarumma. BRUTAL ATAJADA.
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