Temporada 2008/09 en la Bundesliga. ¿Candidatos al título? Bayern Munich, como siempre; Stuttgart, equipo que fue campeón en 2007; Werder Bremen, tras varias buenas temporadas y Schalke 04, conjunto siempre incómodo. Bueno, en aquella campaña, ninguno de los mencionados logró llevarse el título de la Liga de Alemania…
¿Quién terminó como campeón? Wolfsburg. Sí, por primera vez en toda la historia, Wolfsburg logró llevarse la Bundesliga. Al principio del curso era impensable, pero, con el pasar de las semanas, se fue viendo a la mejor versión histórica del cuadro de la W.
Wolfsburg ganaba, gustaba y solía golear. El equipo dirigido por Felix Magath únicamente perdió 7 de los 34 partidos disputados. Los 7 descalabros, por cierto, fueron en condición de visitante.
¿Qué jugadores tenía aquel equipo histórico? Diego Benaglio, Zaccardo, Ricardo Costa, Josué, Okubo, Barzagli, Simunek, Dejagah, Schafer y Genter. Y a la ofensiva tenían un tridente de poder: el talento, clase y tiempo lo ponía el bosnio Misimovic; los goles, velocidad y la frialdad eran cortesía de un brasileño al que le costó muchísimo trascender, Grafite; y la frescura, dinamismo y contundencia, la puso el entonces juvenil Edin Dzeko.
En aquella Bundesliga, Wolfsburgo marcó 80 goles. De esos 80 tantos, 61 corrieron a cuenta del tridente mencionado arriba: Grafite convirtió 28, Dzeko marcó 26 y Misimovic convirtió 7. ¿Toni, Ribéry y Klose? ¡NO! GraZeMovic se robó el show.
La carrera por el título fue peleada, Wolfsburg luchó hasta el fin con Bayern Munich. Los de Magath terminaron con 69 puntos y los bávaros con 67. Pero, más allá del puntaje, el resultado final dejó la sensación de que ganó un equipo diferente. Un equipo propositivo, Un equipo que, sin importar al equipo al que apoyaras, te hacía disfrutar.