Se llama Sergio Hipperdinger, tiene 24 años de edad, aún es jugador de Quilmes y, desde hace rato, vive una situación lamentable por las complicaciones económicas de su club. De acuerdo a lo comentado por el propio jugador, no le pagan desde hace 6 meses y ha tenido que abandonar el departamento en el que vivía porque no puede solventarlo.
¿Dónde vive? En la casa de un hincha de Quilmes. Según lo que comenta, un seguidor del modesto club, que es su amigo desde que estaba en inferiores, le abrió las puertas de su casa para que tenga un lugar donde quedarse: «Él (quien lo recibió) es muy fanático de Quilmes y sigue a Quilmes desde inferiores. Es una relación de tiempo, no de ahora. Yo ya me iba a ir para Chaco (de dónde es), pero me dijo ‘vos no te vas a ningún lado, vos te quedas acá hasta que encuentres un club'».
No es un jugador consolidado en Primera División, pero tiene contrato vigente en Quilmes. Pese a eso, no le pagan desde hace meses: «Tengo contrato vigente con Quilmes hasta el 30 de junio. Seré jugador libre y esperando a ver qué sale».
Con todo y el maltrato, está agradecido con Quilmes: «Buena, yo nací en Quilmes, estoy acá desde los 15 años. Agradecido porque me cumplió el sueño que tienen miles y miles de chicos. Después, bueno, estoy atravesando éste momento de mierda por el manejo de gente que tienen ahí. Pero siempre estaré agradecido a Quilmes».
Seguirá jugando: «Voy a seguir jugando al fútbol. Esto es un momento que hay que pasarlo, y nada más. En cuanto tenga club, voy a jugar. Me quedo libre, no se me terminó la carrera».