Nos gusta debatir. Nos gusta que nos compartan su punto de vista. Por eso, después de ver todos los comentarios que ha despertado el tema, decidimos explicar por qué nos decantamos por ciertos jugadores cuando nos preguntaron por nuestros finalistas virtuales para el Balón de Oro 2016.
Primero, van algunas acotaciones sobre el mentado y anhelado reconocimiento individual:
→ El premio no es para el futbolista que ganó más títulos y tampoco es para el mejor futbolista en el torneo más importante que se disputa en el año en curso. Es para el futbolista que mejor rendimiento tuvo en un periodo de 12 meses.
→ El período que se suele considerar es de noviembre a noviembre. Las votaciones no se recogen a finales diciembre o en enero, sino en noviembre. En pocas palabras: por increíble que suene, en un premio anual, no se consideran los doce meses naturales del año en cuestión.
→ Siempre hemos creído que no se necesita un premio bonito, una medallita brillosa o un diploma impreso en hoja luminosa para saber que estás haciendo las cosas bien. Pero bueno, así es cómo funciona -en la vida- en el fútbol.
→ El reconocimiento para el futbolista con más títulos colectivos en el año aún no se crea y el reconocimiento para el futbolista más decisivo de cada torneo se entrega cada que finaliza el certamen en disputa: Balón de Oro del Mundial, MVP de la UEFA Champions League, MVP de la Supercopa de Europa, Mejor Jugador de la Eurocopa, MVP de la Eurocopa, algunos ejemplos. A lo que queremos llegar es que: el mejor jugador en un torneo -importante- no necesariamente es el mejor jugador en el periodo del Balón de Oro. Por supuesto que suma votos romperla en un Mundial, en una Copa América o en una Eurocopa, pero si un jugador brilló ahí y casi no rindió en el resto de meses, ¿le darían el Balón de Oro? No, ¿verdad?
Después de estos apuntes, es momento de adentrarnos más a lo que comentamos y tantos comentarios despertó: hasta este momento (5 de julio del 2016), nuestros tres finalistas para el Balón de Oro 2016 serían Luis Alberto Suárez, Lionel Andrés Messi y Gareth Frank Bale.
Los elegidos, a nuestro entender, son los tres jugadores más decisivos e influyentes durante el periodo que se está evaluando. Siendo brillantes a nivel individual, son los futbolistas que más diferencia han marcado en sus respectivas participaciones. Han ganado títulos, han hecho muchos goles, han dado muchas asistencias y, además, han influido en prácticamente todos sus encuentros.
A estas alturas de la lectura, muchos deben estar preparando los dedos para mentarnos la madre. Esperaríamos algo como ‘Luis Suárez sólo ganó la Bota de Oro, no ha hecho nada más’ ‘¿por qué carajos está Messi si nada más ganó la Liga/Copa y perdió en la Copa América?’ ‘¿qué hace ahí Bale si Cristiano marcó muchos más goles, fue goleador en la Champions y ha marcado penales cruciales?‘. Todos los argumentos son válidos. Es cuestión de percepción. La percepción lo cambia todo.
Tomando como ejemplo a Cristiano, porque sabemos que muchos lo ven como Balón de Oro 2016, va este apunte: imposible no considerar a una bestia que ha hecho más de 50 goles en el curso. Pero el portugués, pese a sus impresionantes registros, ha estado lejos de tener el peso que tuvo en años anteriores con el Real Madrid y Portugal. Sí, tiene una Champions, está en la semifinal de la Eurocopa de Naciones y ha hecho penales en momentos de alta tensión, pero su influencia en el juego no ha sido la misma de otros años. Esta temporada, con su fútbol, CR7 ha competido en serio por reconocimientos de goleadores, no tanto por los premios a mejor futbolista.
Dicho lo dicho, nuestro ganador, ahora mismo, sería LUIS SUÁREZ. ¿Por qué? Porque, en los partidos en los que ha visto actividad, ha tenido un nivel altísimo. No sólo son sus goles y asistencias, sino el impacto, influencia y consistencia que ha tenido.
La Bota de Oro lo premia como el mejor goleador del mundo, Suárez lo fue. Y el Balón de Oro premia al mejor futbolista del mundo en UN AÑO, y Suárez, por sus goles, pases decisivos, movimientos, capacidad para asociarse, generación de juego e impacto, lo está siendo.
Repetimos: todo esto es al 5 de julio del 2016. Nuestra terna puede cambiar, porque todavía faltan unos meses. Lo mencionamos porque queda lo más sabroso de la Eurocopa y el arranque de la campaña 2016/17.