Nos pidieron conclusiones sobre la semifinal de la Eurocopa 2016 entre Portugal y Gales, así que acá las tienen. No fue el partido más espectacular del mundo, pero sí que dejó muchas cosas como para comentar. Disfruten de la lectura y esperamos sus comentarios en la parte baja de la nota. ¡¡VAMOOOOOOOOS!!
→ Partido que se resolvió en tres minutos. Duelo parejísimo que Cristiano Ronaldo rompió. Previo al córner, en el que CR7 convirtió, era arriesgadísimo poner las fichas por alguna selección. Portugal no fue ampliamente superior, pero, cuando pegó, no dejó que Gales se levantara. Los portugueses pegaron, aprovecharon el mareo galés y los liquidaron con el segundo tanto. Quien no vio el encuentro quizá piensa, tras ver el marcador, que Portugal no tuvo complicaciones, pero no fue así.
→ Malditas ausencias. Una pena que no hayamos podido ver a ambas selecciones con sus planteles completos. Tras el partido, es evidente que la ausencia que más pesó fue la de Aaron Ramsey. Normal que, cuando no cuentas con tu mejor creador de juego, pagues caro. A Portugal le faltó Pepe, que está a un nivel superlativo, pero, sin la carga que implica Ramsey, Bruno Alves y Fonte resolvieron bien.
→ Aaron Ramsey, la baja clave. Insistimos con el tema de Aaron, porque le pesó muchísimo a Gales. No sabemos si la historia final hubiera cambiado, pero estamos convencidos de que, con su ’10’, los británicos habrían puesto a trabajar mucho más a Rui Patricio y toda la defensiva de Portugal. Una lástima que la mafufada de las tarjetas amarillas siga sin ajustarse.
→ Gareth Bale y otro partidazo. No pudo redondearlo, pero Gareth volvió a tener una gran actuación. Se botó, la pedía siempre, dejó rivales en el camino, buscó profundizar y probó al arco. No encontró socios. Robson-Kanú no pudo hacer mucho ante la férrea marca de Fonte y Bruno Alves. Y King, está claro, no es Aaron Ramsey. Cayó, pero se dejó todo. Nada que reprocharse.
→ Cristiano, el diferenciador. Discretísimo primer tiempo. Pero cuando tuvo una, en el arranque del complemento, no falló. Volvió el Cristiano decisivo. El Cristiano de los momentos importantes. No fue su noche más completa, pero levantó la mano cuando su selección más lo necesitaba. Y eso, en partidos de está índole, lo es todo.
→ Cristiano empujó a Portugal lo mismo que Portugal empujó a Cristiano. Tipos extraordinarios como Messi y CR7 nos han hecho perder la sensibilidad y la dimensión de las cosas, pero también, en ciertos momentos, nos encandilan. Tras el partido, leímos muchos ‘Cristiano lleva a Portugal a la final de la Euro’. Cierto, fue el diferenciador en la semifinal, pero, en las rondas KO previas, sus compañeros fueron los que sacaron el pecho. Muchos sostienen que sin los goles de Cristiano ante Hungría, Portugal estaría viendo la Eurocopa en TV. Pero no hay que olvidar lo que pasó en las dos primeras jornadas. Si Cristiano sale en modo Cristiano ante Islandia y Austria, Portugal -porque para eso jugó el equipo- avanza caminando a rondas KO, y no por la ventana. Ronaldo fue clave esta noche, pero, para que él tuviera esta gran oportunidad de romperla, sus compañeros tuvieron que aparecer previamente. Lo mismo pasó, por ejemplo, en el Mundial 2014, con Argentina. En aquel torneo, Messi jaló del carro en fase de grupos y Octavos de Final, pero, en Cuartos y Semifinales, los que hicieron la chamba fueron sus compañeros. Son los más grandes de nuestros tiempos, pero no siempre son los héroes. Cuando merezcan reconocimiento -como CR7 en este partido- hay que decirlo. Pero, cuando el resto del equipo haga lo suyo y los mantenga en la lucha, también se debe apuntar. Cristiano empujó a Portugal a la final lo mismo que Portugal empujó a Cristiano hasta las semifinales.
→ El Nene Nani. El mejor Nani desde hace varios años. Nadie duda de su calidad, pero lo que le ha costado es mantener la regularidad. En la Eurocopa, de lo mejor y más consistente de Portugal. Sin tener el contacto que quisera con el balón, marca diferencia. Además, ejerce mucha presión en la salida del rival. Da gusto verle tan bien y qué buena noticia es que lo tendremos de regreso en una Liga TOP (va a Valencia).
→ Los laterales portugueses. Nos ha agradado mucho lo que han hecho en esta Eurocopa Raphael Guerreiro y Cedric. Fernando Santos los probó y, sobre la marcha, se adueñaron de la titularidad. Seguros en defensa y tienen muy buen criterio para sumarse al ataque. Lo mejor del todo es que los dos está jóvenes, así que Portugal, si las cosas siguen así, tienen laterales para un buen rato…
→ Labor callada. No reciben reflectores, pero su labor ha sido muy destacada. Adrién Silva, el posicionamiento y claridad distributiva. Renato Sanches, la potencia, recuperación y vía de descarga. Danilo, el músculo que reemplazó al ausente William Carvalho. Y Joao Mario, que en Sporting Lisboa juega mucho más libre, se ha sabido fajar y ha ayudado muchísimo en labores defensivas. Si Gales sufrió para crear se debió, en gran medida, al trabajo de los mediocampistas portugueses.
→ Grande Gales. Superaron cualquier expectativa. Se dejaron todo y regalaron ratos muy agradables de fútbol. Difícil que olvidemos el partido que le hicieron a Rusia y a Bélgica. Una selección modesta y novata que, sin los nombres de otras, se metió entre las cuatro mejores y luchó hasta el final. ¿Pánico escénico? JAJA. Lo de Gales ha sido, sin importar lo que pase en la final, uno de los highlights principales de la competencia.
→ La final. Se clasifique Francia o Alemania, Portugal no será favorito en la final. Normal. Tampoco, para muchos, lo era ante Croacia y Polonia, y vean a dónde llegó. A estas alturas, imposible descartar. Se sabe que se medirá a una selección bravísima, pero en 90 minutos cualquier cosa puede pasar. El momento anímico es inmejorable y la presión irá para el otro lado. Portugal tiene una oportunidad dorada para hacer historia.