Siempre pensó en el deporte. Eso sí, antes de dedicarse completamente al boxeo, Misael Rodríguez soñaba con convertirse en futbolista profesional. Le gustaba la pelota, como casi a todos los niños mexicanos, pero no tardó mucho en darse cuenta que no sería el camino…
Pese a su gran gusto por el deporte más popular del país, El Chino decidió dejar de enfocar su atención al fútbol para probar en otra disciplina. ¿La razón? En el fútbol, muchas veces, se depende de otros, mientras que en deportes individuales destacas según trabajes y te esfuerces de manera completamente personal.
«Yo practicaba fútbol de chico, sólo que en el fútbol es más difícil destacar. En el boxeo vi que era un deporte personal. Si tú entrenabas bien, te iba bien. Si tú te disciplinas, a ti te iba bien. Y en el fútbol, no. Muchas veces no son tus errores por los que tienes un mal resultado, sino por los -errores- de los demás», declaró, en una entrevista para UFCEspañol.
Dejando el fútbol de lado, Misa se concentró en el boxeo, deporte que veía desde muy temprana edad con su familia: «Yo llegué al Boxeo, porque lo veía en todos lados. Me acuerdo que, mi familia, nos sentábamos a verlo todos los sábados».
Aurelia Olivas, madre de Misael: «Era muy buen futbolista, muy buen defensa. Desde que era niño varias personas iban a decirme: ‘présteme a su hijo, présteme a su hijo para jugar fútbol’… Pero como a los 14 años dijo que él ya no quería jugar y decidió retirarse. Dos días después me dijo que ahora entrenaría boxeo».
Su talento, trabajo y, sobre todo, disciplina lo han llevado a cosechar éxitos en su corta carrera como pugilista, pero no se ha olvidado por completo del fútbol. El hoy medallista olímpico sigue pendiente de la pelota y su equipo favorito es el actual campeón del fútbol mexicano: Pachuca.
Como todo hombre de bien, el @elchinono94 es un fiel seguidor del fútbol. El hoy medallista olímpico es de @Tuzos. pic.twitter.com/EjcUBJf12M
— Invictos (@InvictosSomos) 15 de agosto de 2016