En sus días en el fútbol mexicano logró posicionarse como uno de los mejores jugadores del continente y uno de los personajes mejor valorados en la Selección absoluta de Paraguay. Salvador Cabañas la rompió en México jugando con Jaguares de Chiapas y América, siendo este último club el que le dio el escaparate internacional para ser pretendido por gigantes de Europa.
De acuerdo a declaraciones del propio guerrero guaraní, en entrevista con el diario Marca, previo al momento que le cambió la vida (disparo), el Manchester United estuvo interesado en ficharlo. La entidad del Old Trafford ofertó por sus servicios, pero el Club América, consciente de lo importante que era Chava, hizo todo por retenerlo.
«Tuve contacto con el Manchester United y estuve a punto de irme cuando sufrí el disparo en la discoteca. Hubieron propuestas para ficharme, pero el América no quiso venderme, y como yo estaba acostumbrado al equipo, dejé la decisión en manos de ellos», comentó.
En otra entrevista, Salvador compartió que América hizo grandes esfuerzos económicos por retenerlo y, como estaba feliz en México, no forzó su salida: «Manchester United me quería y me dijo el América que no me querían vender. ‘Nosotros te vamos a pagar lo mismo que te van a pagar en Europa’, me dijeron. Y así fue que me doblaron el sueldo, los premios que ganaba yo eran diferente al resto del grupo. Y me regalaron dos departamentos que tengo en Cancún y Acapulco», añadió.
América logró retener a su goleador, pero el atentado del 25 de enero del 2010 evitó que Salvador siguiera mejorando sus registros y hazañas con la institución más ganadora del balompié azteca.
Estar en el lugar incorrecto, en el momento incorrecto, impidió que El Mariscal siguiera haciendo historia…
Cabañas: «El América es todo para mí, me dejó muchas cosas a nivel futbolístico y yo les deje muchas cosas a ellos también. Soy uno de los jugadores con más partidos en los azulcremas y el ser un ídolo en ese equipo era lo mejor».