Nada lo ha detenido. Dejó su casa siendo un niño y, aunque vivió momentos complicados, tuvo la seguridad, confianza y fortaleza mental para mantenerse en Lisboa y luchar por su sueño. Tenía un talento tremendo, pero, contrario a lo que muchos podrían pensar, estaba lejos de ser un portento físico.
Miguel Paixao, uno de los amigos más cercanos de Cristiano desde sus días en Sporting de Portugal, cuenta que a CR7 solían decirle que era muy bueno y rápido, pero su problema era que estaba muy delgado. Al nacido en Funchal no le gustaba nada esta clase de comentarios, así que se dedicó a trabajar…
¿Qué hacía el actual máximo goleador del Real Madrid y Portugal? De todo. No le importaba meterse a escondidas al gimnasio del Sporting o vincular sus actividades diarias con algún detalle que le permitiera mejorar en el aspecto físico.
«Cuando Cristiano era muy delgado, los colegas le decían: ‘eres muy bueno técnicamente y muy rápido, pero estás demasiado delgado’. Y no le gustaba nada. Nadie sabe cómo, pero, por la noche, se colaba al gimnasio del Sporting. Después de cenar, se subía al tejado y, usando una escalara, entraba al gimnasio, donde hacía sus ejercicios sin ningún preparador. Creó su propia serie de ejercicios. Cuando alguien le descubrió y le dijeron que no era bueno porque aún era un chico, se llevó un castigo. Pero no se rindió, consiguió dos cubos para llenarlos con agua y, mientras se duchaba, los llenaba de agua para hacer pesas. Hacía sentadillas para fortalecer las piernas y también trabajaba los brazos», confesó Paixao.
¿Otra práctica de Cristiano? Ponerse pesas en los pies: «En nuestro camino a casa, cuando se ponía la luz roja en el semáforo para el tráfico, se paraba junto a los carros. Y, cuando se ponía la luz verde, arrancaba a velocidad máxima. Después, me decía: ‘soy más rápido ahora, ¿verdad?’ Siempre quería mejorar en todo. Y lo logró», reveló el amigo cercano del portugués.
No existen las casualidades, Invictos. Cierto, Cristiano nació con un talento extraordinario, pero, para poder ser lo que es hoy en día, tuvo que trabajar como nadie más lo hizo. Es ese constante deseo de superación e incansable espíritu de lucha lo que le ha permitido convertirse en uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos. Qué ejemplo.
¿Sabías que..? Cristiano Ronaldo vivió sin su familia prácticamente desde los 12 años de edad. Sin siquiera ser un adolescente se alejó de las personas que más quiere en búsqueda de su sueño.
Dato Invicto. Cristiano llegó al primer equipo del Sporting tras sólo 4 años en las inferiores.