Lo heredó del papá. Luis Suárez ha confesado que su pequeño hijo Benjamín es un loquito por el fútbol. El nene ya se inició en el equipo infantil del FC Barcelona y, pese a que entrena, no deja descansar a su padre porque se la quiere pasar jugando a la pelota en casa.
«El mío (Benjamín es insoportable con el fútbol. Tiene 3 años y medio. Él tiene entreno de 5 a 6 y termina el entreno y me dice: ‘papi, no estoy cansado’. Como diciendo: ‘ahora quiero llegar a casa y seguir jugando’. Y ahí me tienes jugando hasta las 7 y 8. Y se enoja y se pone a llorar cuando no quiero jugar…», contó, en entrevista para ElTransistor.
Suárez reveló que el buen Benja le está encontrando gusto a la portería. Y es que resulta que es gran admirador del alemán Marc-André ter Stegen: «Se pone de portero porque le encanta ter Stegen… y Muslera. Y tiene la camiseta, ahora Marc le regaló la camiseta, los guantes y anda con el peinado de ter Stegen (risas). La verdad que, en ese sentido, me tiene loco».
Lo disfruta muchísimo: «Son etapas que, la verdad, las disfruta mucho. Él lo pasa bien. Él disfruta. Lo lindo es disfrutar de los niños a esta edad espectacular».
Dato Invicto. Benjamín Suárez nació cuando Luis Suárez aún estaba en Liverpool. El primer estadio al que asistió fue el mítico Anfield. Aquel curso, el charrúa fue Bota de Oro.