La noticia se confirmó: Estados Unidos, México y Canadá presentan su candidatura conjunta para ser anfitrión de la Copa del Mundo 2026. La noticia, en la previa, despertó muchas expectativas pero, luego de conocer la manera en la que se distribuirían los partidos, inició la polémica y las sensaciones, para muchos, no son nada positivas…
DISTRIBUCIÓN DE PARTIDOS SI SE GANA EL MUNDIAL 2026
➔ Estados Unidos: 60 partidos (incluidos Cuartos de Final, semifinales y final).
➔ México: 10 partidos.
➔ Canadá: 10 partidos.
La realidad es que México no estaba cerca de recibir la Copa del Mundo 2026. Estados Unidos se habría candidateado solo y, probablemente, lo iba ganar. Es decir: de alguna manera, México y Canadá lograron meterse a una fiesta a la que, en principio, no estaban invitados.
¿10 partidos o nada? ¿La Selección de México jugando en su país en una nueva Copa del Mundo o nada? He ahí el debate. Por supuesto que nos agrada la idea de ver al TRI jugando partidos mundialistas en casa, pero hay que medir las consecuencias de haberse colado a la fiesta. Porque sí, por estos 10 partidos, México va a dejar de ser opción para un Mundial en solitario en muuuuuuuucho tiempo.
Estados Unidos ‘comparte’ y prácticamente se asegura de tener la Copa del Mundo en su país. México, por su parte, logra meterse a una pachanga que, probablemente, lo deje sin la máxima fiesta en el mundo del fútbol por décadas y décadas.
¿Qué prefieren futuro a mediano plazo (2026), 10 partidos mundialistas, ser parte de la estrategia de USA para ganar la sede y prácticamente descartarse para justas mundialistas de las próximas décadas o no colarse a la fiesta, mejorar las condiciones de los estadios actuales, invertir más en infraestructura (país-fútbol) y ser candidatos serios en solitario para una justa mundialista en 15-25 años? Esa esa la pregunta que debe estar en la mesa. Nosotros, a bote pronto, iríamos con el segundo escenario, pero sólo revisando estadios, infraestructura nacional (carreteras, aeropuertos etc) y momento económico se podría resolver con cierta solidez.
El descontento general nace de la expectativa. Si anuncias un comunicado histórico y sales a decir que tienes 10 de 80 partidos mundialistas, normal que venga la lluvia de mentadas de madre. Cómo habrían cambiado las cosas si dicen que estábamos lejos de organizar un mundial, que la situación actual del país no está para albergar un evento deportivo de esta índole y que, de nada, se consiguieron 10 partidos, incluidos los del TRI, ¿no? Gestión.
Es un tema muy complejo. Lo único que tenemos claro es que, si esta es la única manera en la México estará inmerso en una Copa del Mundo en los próximos 30-40 años, se tiene que hacer un esfuerzo por negociar los partidos que vendrán. Todos los de TRI tendrían que ser acá. Alguna ronda KO debe venir. Y la final se tendría que jugar, sin lugar a dudas, en el estadio en el que se inmortalizaron Diego Armando Maradona y Pelé.