Standard de Liège es el nuevo club del portero mexicano Guillermo Ochoa. A primera instancia, nuestra reacción fue de sorpresa y incredulidad, pero es momento de reflexionar y analizar más allá del impacto de la noticia…
¿Memo Ochoa habría aceptado ir a Bélgica si hubiera tenido un mejor ofrecimiento?
Exacto.
Sin haber escuchado su versión, parece claro que la oferta del club de la ciudad de Liège fue la más seria que tuvo en el mercado europeo. Y, de ser así, reconocemos la valentía, persistencia y deseo de superación del futbolista surgido del Club América.
¿Por qué? Porque bien pudo aceptar una oferta de la Major League Soccer/Liga MX y regresar a su zona de confort. Pero no. Quiere mantenerse vigente en el fútbol del viejo continente para seguir luchándola.
Su situación en el tema pasaporte es incierta y, quizá, lo de llegar a Bélgica (no hay límite de extranjeros) es un paso previo para, una vez cumplidos los trámites requeridos, buscar acomodo en una institución de mayores pretensiones deportivas.
Las realidades son inobjetables: la Jupiter Pro League es una Liga formativa y pertenece al segundo o tercer escalón de Europa, Memo Ochoa será titular indiscutible/tendrá actividad en cada partido y, pese a que no es la mejor de las competencias, seguirá compitiendo en Europa (no es un tema menor).
Por su extraordinario rendimiento con la Selección absoluta de México, por sus sobresalientes tardes con Ajaccio y su buen año en su única temporada como titular fijo en España (Granada), creímos que tendría mejores opciones, pero es lo que hay.
Como bien dijo el propio Guillermo: en Europa les importa un carajo si es el portero titular del TRI o si es ídolo del equipo más ganador/mediático de México, se tiene que empezar de cero. Y más si eres de una nacionalidad cuyos jugadores apenas se están dando a conocer en el viejo continente.
Una Liga de mucho menor nivel que la española, pero nuestra postura no cambia:
A muerte con los valientes. Con los que luchan por sus sueños. Y por los que, por más difícil que esté la situación, nunca bajan los brazos. Para muchos, Memo da un paso hacia atrás y tiene un pésimo representante (dudamos que su agente trabaje para joder a su jugador/amigo). Para nosotros, Memo, efectivamente, va a competir en una Liga de menor nivel, pero se mantendrá fiel a lo que cree y seguirá haciendo lo que ningún otro portero mexicano había hecho: salir de la comodidad y luchar en Europa.
Hoy no se valora, porque en México no es una práctica común. Pero, en un futuro, entenderán la importancia de lo que ha hecho Ochoa. El nacido en Guadalajara está abriendo/laburando el camino. Mientras pelea por su sueño, está pavimentando para que los próximos no tengan que andar en una carretera empedrada. Algo como lo que ha hecho Chicharito Hernández o lo que han hecho los mexicanos que han pasado por el PSV. ¿O creen que es coincidencia que México tenga cada vez más jugadores en la Bundesliga y que el club holandés siga apostando por jugadores aztecas?
No sabemos ni cómo ni cuándo, pero Memo tendrá su premio.
Porque la gente que trabaja, persiste y se deja todo siempre lo tiene.
Le deseamos todo el éxito en Bélgica. Primero, por él y su familia. Y segundo porque, en un país donde se crítica mucho y se hace poco, es esperanzador ver que hay personas que trabajan más en hacer que en criticar, o simplemente observar.