En apenas 6 meses, Hirving Lozano ha dejado claro que va sobrado en la Eredivisie de Holanda. El contexto es el ideal. Tras dominar en la Liga MX, llegó a uno de los mejores equipos de un campeonato en el que se ataca mucho más de lo que defiende.
En la Eredivisie (un fútbol de desarrollo y crecimiento), ha encontrado muchos metros que recorrer y muchas opciones para explotar su fantástico manejo de transiciones en velocidad. Además, sigue exhibiendo su poderío a la hora de atacar espacios (sus diagonales son oro para los lanzadores del PSV).
Siempre lo hemos dicho: si algo nos gusta del fútbol de Lozano es lo poco que especula. No es un gambeteador ni un tipo que sobrepiensa las cosas. En cuanto recibe, busca dañar. Ya sea con un cambio de ritmo para desbordar/centrar o un regate para recortar hacia el centro/disparar, Hirving siempre intenta penalizar.
Lo hemos seguido a detalle durante el primer capítulo de su aventura europea. Y hemos notado un crecimiento considerable en su toma de decisiones. Todavía sigue teniendo un margen para mejorar en ese sentido, pero cada vez exhibe un mejor criterio a la hora de decidir si es momento de hacer una acción individual, de asociarse o de buscar un desborde.
También vale la pena destacar su plurifuncionalidad. En PSV está impactando tanto como extremo izquierdo como extremo derecho. Él, nominalmente, juega por izquierda, pero desde la salida de Locadia (habilitan a Bergwijn en el XI) se le ha visto más por derecha (no desconoce la zona, porque también ha jugado ahí en Pachuca y la Selección de México). En ambos costados ha marcado diferencia. Son diferentes versiones de Lozano; sin embargo, en ambos puestos le ha sido útil al míster Cocu.
Por izquierda se ve a un Lozano más explosivo y más finalizador (jugar a perfil cambiado le fascina porque puede enganchar para buscar el arco), mientras que por derecha es un Lozano de más desborde y más juego colectivo (no por nada ha incrementado sus registros asistentes y ocasiones generadas en lo que va de 2018).
El origen de esta #ColumnaInvicta fue la pregunta que nos hicieron tras el PSV vs Excelsior: «¿Cuál debe ser el siguiente paso para la carrera de el gran Hirving?».
Lo ideal sería dar el salto a otro campeonato. En Holanda, como lo apuntamos aquí, va sobrado. ¿A cuál? Dependerá de lo que pase en los siguientes meses. Si mantiene este nivel en lo que falta de temporada y logra firmar un gran Mundial, seguramente algún club grande tocará la puerta. En caso de ser así, sólo valdría la pena intentarlo si realmente hay posibilidades de ser titular (un club importante que esté renovando plantilla, por ejemplo).
Si no es el caso, habrá que llevar las cosas con más calma. Si precipitar las cosas (decirle que sí a un club grande que está coleccionado cromos) podría sepultarlo en la banca, Hirving debe pensar en mantener este ritmo de crecimiento. Es decir: pasos no tan rápidos, pero sólidos. Quizá un club competitivo en Francia o Alemania, para después, una vez con más experiencia europea, abrirse un camino en Inglaterra y España.
Nos emociona el futuro de Lozano. Un jugador valiente, con mentalidad, con mucha personalidad y, sobre todo, calidad futbolística. Y sí, es MEXICANO.
Dato Invicto. Hirving Lozano ha participado directamente en 19 anotaciones (13 goles y 6 asistencias) en sus primeros 20 partidos en la Eredivisie de Holanda. Es el máximo anotador de la Eredivisie y el máximo goleador/asistente del PSV. Brutal.
¿Sabías que…? Hirving Lozano ha convertido 15 goles en los 25 partidos que ha disputado en el fútbol del viejo continente. Ha hecho anotaciones en Eredivisie y Copa de Holanda.