Ejercicio rápido: te llamas Florentino Pérez, eres presidente del club más importante a nivel mediático/histórico en todo el mundo y, de manera un tanto inesperada, tienes a tiro al portero que acaba de ganar el Guante de Oro del Mundial de Rusia 2018.
En tu plantilla, cuentas con un cancerbero TOP, quien se ha agigantado en momentos de adversidad. Pero, tocando a tu oficina, se encuentra este chico de 26 años de edad, con experiencia previa en España (dos veces trofeo Zamora), que ha ganado el Golden Glove en la Premier League y que viene de firmar una extraordinaria participación en el torneo más importante al que aspira un futbolista.
La situación se hace aún más tentadora porque no solo es que el futbolista quiere jugar para tu club (por temas personales y deportivos), sino que comprarlo de forma definitiva sería una ganga (considerando los valores actuales en el mercado) porque está un año de terminar contrato con el club al que pertenece.
¿Cuál es tu decisión? ¿Lo fichas o lo dejas ir? Si lo fichas, aprovechas una oportunidad de mercado irrepetible. Porque, de dejarlo escapar, probablemente renovaría con su actual club y o se iría a otra institución, donde, con contrato de larga duración, tendrías que pagar una locura por su ficha.
Y vale agregar que dejándolo ir, aunque seguirías teniendo a un arquero de altísimo nivel, te quedarías sin un segundo arquero de verdaderas garantías y, encima, el #1 en el puesto ya supera los 30 años de edad. Cierto, podría prolongar su gran momento durante 3-4 campañas, pero es que el que viene con sus cajas y maletas apenas tiene 26 años de edad. Es decir: ¡un portero para -casi- una década!
Repetimos la pregunta: ¿qué haces en esa posición?
Nosotros lo tenemos clarísimo: HARÍAMOS LO MISMO QUE FLORENTINO.
Sí, Invictos, también habríamos fichado a Thibaut Courtois.
No era un fichaje necesario, sí una oportunidad de mercado. Y a las oportunidades de mercado, siendo un gigante del fútbol mundial, no les puedes decir que no porque no es una necesidad de corto plazo. No estamos refiriéndonos a traer a cualquier portero. Estamos refiriéndonos a fichar a Courtois, que potencialmente puede ser el mejor del mundo, por menos de 40 millones de euros.
Para entender las decisiones directivas, hay que visualizarse en ese sitio. Y haciendo el ejercicio que les compartimos, no nos queda ninguna duda de que la directiva del club blanco ha hecho lo mejor, pensando en lo que viene para la institución. Lo de Courtois puede ser un éxito total o puede resultar un fiasco monumental pero, cuando el tren está pasando, te tienes que subir. Se debe ver por el club, no por los nombres.
Nos jode lo de Keylor Navas porque es un porterazo, porque conocemos su historia de lucha, porque honestamente nos simpatiza y porque nos parece que, tomando en cuenta todo lo que ha hecho desde que defiende el escudo madridista, sí ha sido maltratado.
Ojo, no creemos que lo de Courtois sea una falta de respeto a Navas. Como decimos: al Real Madrid se le presentó una chance irrechazable, e hicieron lo que debieron hacer. Los maltratos vienen desde el tema fax-De Gea. Sacando a Zinedine Zidane, no ha habido una postura contundente de la directiva para defender y valorar todo lo que ha hecho Keylor en los últimos 4 años.
Y es que, además de ser un guardameta fantástico, ha sido un profesional ejemplar. Cuando estaba Iker y casi no le tocaba jugar, siempre estuvo a la altura. Cuando estuvo a un fax de irse, volvió, se dedicó a trabajar y ganó la Champions. Y cuando le hablaban de posibles reemplazos o elementos de competencia, nunca cayó en polémicas. Dejó de lado su situación personal, anteponiendo el bienestar colectivo. Un chingón. Un profesional intachable.
Pensamos que Keylor seguirá en el club y luchará por el puesto. Pero si no lo hiciera, si decidiera marcharse este verano o en el mercado invernal, no tiene nada que reprocharse. Pase lo que pase en los próximos meses (o cursos). Su legado es imborrable. Hizo lo que ningún otro portero del Real Madrid y consumó algo que quizá jamás volveremos a ver: fue el guardián del único tricampeón en toda la historia de la UEFA Champions League.
La historia no se borra. Y en este caso, hasta favorece. Porque en unos años, cuando se hable del tricamponato de UEFA Champions League del Madrid de Zidane, se recordará que en el arco estuvo el costarricense Keylor Navas y que, pese a que le buscaron reemplazo prácticamente desde que terminó su presentación, fue fundamental.
Con o sin Courtois, Keylor Navas ya es LEYENDA.