Pablo Pérez, el jugador que resultó más lastimado por las agresiones al autobús de Boca Juniors, compareció ante los medios de comunicación. El capitán del gigante argentino relató que todo lo ocurrido fue muy extraño, ya que, de no haber nadie después de cruzar un puente, apareció un grupo de inadaptados que se dedicó a tirarles piedras/objetos. Lo que Boca vivió durante tres minutos no se lo desea a nadie.
«No había mucha gente después de cruzar el puente. Y, de repente, aparecen 200 personas a dedicarse a tirar piedras… No sé qué pasó, pero fue muy raro, porque no había mucha gente después de pasar el puente. Y resulta que estaba toda la gente acumulada en un solo lugar. Fueron tres minutos que, la verdad, no se lo deseo a nadie. No estoy mintiendo y no estoy exagerando nada. Cuando se golpeo a un compañero, todos fuimos a tratar de ver qué le pasaba. Eran estallidos de vidrio constantemente. Y no fue muy lejos de la entrada al estadio».
También apedrearon la ambulancia en la que salió del Monumental: «Cuando salgo del estadio, nos siguen tirando piedras en la ambulancia. Cuando salimos nos volvieron a tirar piedras. No es una cosa menor lo que pasó. La verdad que es muy triste, también por la gente de River, porque hay gente que no tiene nada que ver y se está fumando todo esto. Esto no puedo ser. Si el ojo me lo sacan, no me lo paga nadie (…) Cuando me fui en la ambulancia, apenas salí del portón del estadio, nos volvieron a tirar piedras. No podían volver a lastimar. Te lo puede decir el que conducía, te lo puede decir la enfermera que nos acompañaba».
Le preguntaron si se debía jugar el partido y, aunque en principio no quería responder directamente, dijo que no podía ir a una cancha en la que sabe que puede llegar a morir. Se cuestiona qué hubiera pasado si Boca ganaba: «¿Cómo vamos a ir a una cancha donde no me brindan seguridad? ¿Qué pasaba si nosotros jugábamos y ganábamos? ¿Quién me saca de ahí? ¿Quién me saca? Si la gente estaba loca antes de entrar, imagínate si nosotros vamos y ganamos en su cancha, les damos la vuelta en su cancha. ¿Qué pasa? ¡Me matan! Yo tengo 3 hijas, tengo a mi señora. Mi hija mayor, cuando entré a mi casa, me abrazó y estaba llorando. Yo no puedo jugar al fútbol así, si voy a una cancha donde sé que puedo llegar a morir».
"YO NO PUEDO JUGAR EN UNA CANCHA DONDE SÉ QUE PUEDO LLEGAR A MORIR"
"ESTABA EN EL HOSPITAL Y EL DT ME LLAMÓ PARA QUE VAYA PORQUE SE JUGABA"#90MinutosFOX | La indignación de Pablo Pérez, capitán de Boca. pic.twitter.com/kwIYbbXMAT
— FOX Sports Argentina (@FOXSportsArg) 26 de noviembre de 2018
De no creerse lo que sucedió.
Lo que pintaba para ser una fiesta histórica se convirtió en una VERGÜENZA MUNDIAL.
Dato Invicto. Pablo Pérez juega en Boca Juniors desde 2015. Uno de los referentes.
¿Sabías que…? En 2018, Pablo Pérez debutó con la Selección de Argentina.