Triunfo de autoridad del PSG en el mítico teatro de los sueños. AS Roma sacó ventaja ante el Porto en el Stadio Olímpico. Real Madrid mostró su pegada y jerarquía en territorio holandés. Y Tottenham dejó seminoqueado al Borussia Dortmund.
¡¡VAMOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOS!!
PSG Y UNA VICTORIA MUY SÓLIDA EN OLD TRAFFORD
➔ Golpe en la mesa. PSG debió salir muy fortalecido de la cancha del Manchester United. No solo fue el resultado, sino la forma. Sin Neymar y sin Cavani, y enfrentando a un equipo que venía muy enrachado/motivado, controlaron el partido de principio a fin. Hubo actuaciones individuales muy destacadas, pero la realidad fue que el colectivo sostuvo. Ganaron siendo un equipo con todas las letras.
➔ El plan de Tuchel contra el United. Sin dos de sus grandes referentes disponibles, había que concentrarse mucho más en la labor grupal. Necesitaban ser un equipo compacto, tener argumentos para intimidar en ofensiva y, además, controlar los contraataques que los red devils venían exhibiendo. Lo consiguieron gracias a la flexibilidad táctica de Thomas Tuchel y a la gran interpretación que hicieron los jugadores. En ataque, 3-4-2-1. Los tres centrales y Marquinhos/Verratti generaban superioridad para sacar la pelota. Alves/Bernat se abrían como carrileros para estirar al rival. Di María/Draxler interiorizaban para tratar de dañar entrelíneas. Y Mbappé fijaba arriba. Y en defensa, 4-4-2. La conversión era rápida: Bernat baja como lateral izquierdo, Kehrer pasaba de central a lateral y los recorridos de Alves eran importantísimos para apoyar a Marquinhos en el trabajo contra Pogba, que era la principal arma de peligro del United (por sus lanzamientos y su estado de forma). Fue un recital estratégico/táctico de Tuchel. Y los futbolistas, con su ejecución, se devoraron al elenco inglés.
➔ Alimentaron a Ángel Di María. Desde el minuto uno, pitos, abucheos e insultos. Y después del -innecesario- choque con Young, el ambiente se tensó aún más. Di María respondió con gestos de reto, pero no dejó que el ambiente lo aislara del encuentro. No se escondió. Al contrario, quería más balones. Cerró la noche con dos asistencias y siendo el máximo generador de ocasiones (4). Los hinchas pensaron que lo increparían y lo terminaron motivando. Contra los jugadores que son capaces de marcar diferencia y desequilibrar, mejor no meterse. Lección aprendida.
➔ Marquinhos y Verratti en Old Trafford. En zona medular, mandaron ellos. Marquinhos cumplió con su misión: reducir al máximo la influencia de Pogba, no comprometer mucho sus entregas y cerrar, en caso de que fuera necesario, cuando el United llevaba el juego a sector izquierdo. Verratti, por su parte, fue la brújula. Sacando algunos lanzamientos que pudieron ser mejor y un par de balones que tardó en soltar, fue quizá su mejor noche como visitante en UEFA Champions League. El organizador del equipo de Tuchel. Dentro de todas las malas noticias que recibió Tuchel en las últimas semanas, vino una buena nueva: el regreso de Verratti. Su partido manejando tiempos, distribuyendo y orientando hacia el lado que veía con menos tránsito, fue extraordinario. Y aprovechando este punto, otro nombre que no se puede dejar de mencionar es el de Thiago Silva. Fue el líder defensivo. Se comportó como capo.
➔ Una triste noche para el United. No fueron capaces de llevar al límite a un PSG disminuido. Un tiro al arco en 90 minutos. Pogba, nulificado por Marquinhos/Alves (ojo a cómo lo desarmaron entre los dos en el inicio de la jugada del tanto de Kylian Mbappé). Martial no la vio. Lingard, que parecía que podía dañar metiéndose por carriles interiores (en ataque el 4-3-3 del United se hacía 4-3-1-2), se lesionó. Y Alexis y Mata, entre que casi no fueron activados y que están lejos de su mejor momento, no impactaron en absoluto. Matic y De Gea, los que salvaríamos. Aunque Nemanja perdió muchísimos puntos porque fue quien falló en el gol de Kimpembe. Los superaron por completo en Old Trafford. Y aunque lo bonito del fútbol es que nada se puede dar por descartado, visto lo que sucedió en Old Trafford, y teniendo en cuenta la expulsión de Pogba, sería milagroso que sean capaces de remontarlo en el Parc des Princes. Casi una hazaña.
ZANIOLO, DZEKO Y VENTAJA PARA AS ROMA
➔ La joya de AS Roma, y de Italia. Su irrupción es una de las grandes esperanzas para La Loba y, sobre todo, para la Selección de Italia. Con apenas 19 años de edad ya ha condicionado partidos de Serie A de Italia y de UEFA Champions League. Y, además de la edad, se tiene que hacer mención que fue verdugo del Porto jugando fuera de su posición nominal. Él es mediapunta. Es un volante ofensivo que, por decisión de Eusebio Di Francesco, partió como extremo derecho contra los dragones (en un 4-3-3). Actuó como jugador de banda de finalización, y se comportó a la altura. De tres tiros al arco, mandó dos a guardar. Y lo consiguió enfrentando a un inspirado Iker Casillas. En cuanto a calidad técnica, precisión, interpretación y toma de decisiones, es un alumno avanzado entre los jugadores jóvenes que ahora mismo compiten en las Ligas TOP5 de Europa. Recuerden el nombre de Nicolò Zaniolo.
➔ El partido de Edin Dzeko. El juego de espaldas del bosnio fue el argumento competitivo que permitió que se rompiera el cero en la cancha del Stadio Olímpico. No solo controló estando en desventaja (con Pepe encima), también aguantó el balón y habilitó al compañero mejor ubicado (Zaniolo). Y el ex Manchester City también estuvo directamente involucrado en el segundo tanto de AS Roma. Recibió, aguantó, condujo ante la presión de Héctor Herrera y sacó un disparo que pegó en el poste. Y como el rebote les favoreció a los locales, Zaniolo no perdonó. El hombre de la noche fue el juvenil nacido en 1999, pero su doblete no se podría entender sin Edin.
➔ San Iker Casillas dejó al Porto en la serie. El campeón del mundo se encargó de sostener a su equipo cuando la noche era más oscura. AS Roma pudo haber marcado un par de anotaciones más, lo que habría dejado con muy pocas opciones al campeón de Portugal. Un 2-1, que con ese golito de visitante a Adrián, deja el cruce abiertísimo. Si consiguen avanzar, tendrán mucho que agradecerle a Casillas. 7 atajadas (5 dentro del área). Salvó al Porto hasta con la cara, JA. No solo es alargar tu carrera el mayor tiempo posible, es hacerlo y mantenerte competitivo. Él y Buffon están en otro escalón. Los más grandes de la historia.
➔ Las ausencias en Porto. Sérgio Conceição tuvo que preparar el partido sin dos titulares habituales. No cambió el sistema (4-4-2), pero ni Otavinho ni Fernando ofrecen lo mismo que Marega y El Tecatito. Moussa tiene cualidades que se complementan mejor con Tiquinho, atacante que, pese a ser un buen depredador, tiene mucha movilidad. Y Jesús se ha convertido en un soldado para el míster portugués. Como volante o como lateral, está rindiendo a un nivel muy alto. Aporta desequilibrio, inventiva y su compromiso se percibe en cada recorrido largo. Y, encima, es el jugador que más fino ha estado en el último pase, siendo el líder de asistencias del plantel. El marcador no es lapidario, jugarán en casa y, si todo sale bien con la molestia de Marega, volverán dos jugadores muy importantes (Corona sí estará porque ya pagó su sanción). Porto complicará a AS Roma en do Dragao.
LA PEGADA DEL CAMPEÓN DE EUROPA PUDO MÁS
➔ El marcador no reflejó lo que fue el trámite. Ajax compitió a un nivel buenísimo, exhibiendo, por momentos, al tricampeón de Europa. Su primer tiempo fue digno de ser grabado. Propusieron un ritmo alto, presionaron con inteligencia (fueron a buscar, pero sin volverse locos), generaron a través de juego asociativo y exigieron a Thibaut Courtois. Normalmente, dejaban que el Madrid saliera un poco y, en cuanto intentaban acercarse al segundo bloque, se intensificaba la presión. Cada uno tenía su objetivo en esta fase: Tadic con los centrales, Neres/Ziyech con jugadares de banda, van den Beek contra Casemiro, Frenkie de Jong se iba con Modric, y Schone seguía a Kroos. Con esta tónica, recuperaron muchos balones en campo rival. Y a partir de ahí vinieron varios de sus ataques peligrosos. Nos fascinó la primera mitad de Tadic. Nunca se dejó referenciar (cumplió la función de falso 9) y, estando de espalda o de frente, ponía en ventaja a los compañeros que le acompañaban. La verdad que cuesta solo mencionar a un jugador del Ajax (por lo hecho en la primera mitad), ya que todos cooperaron en ese marcado lapso de superioridad contra el rey de la competición.
➔ La diferencia estuvo en las áreas. Ajax dejó vivir al Real Madrid. Y eso es algo que no te puedes permitir contra los gigantes. En el descanso, la sensación era que los de Erik ten Hag tuvieron para ponerse 2-0. La cosa es que, entre remates desviados y Courtois, no pudieron redondear su performance. Real Madrid no generó tanto. Fue vertical y, a la vez, letal. Chispazo de Vinícius, gol de Benzema. Contraataque a velocidad, centro de Carvajal, y gol de Marco Asensio. Courtois trabajó más que Onana. La jerarquía del campeón frente a un equipo que, aunque jugó muy bien, expuso inexperiencia.
➔ El gol anulado a Tagliafico. Entendemos que exista polémica y debate porque es una jugada cerradísima. La cuestión es que, con el reglamento en la mano, los árbitros involucrados (central y auxiliares del VAR) decidieron correctamente. Tadic estaba en offside (Reguilón era la referencia) e interfirió a Courtois. El serbio se movió un poco hacia la izquierda, cuando Courtois -que no iba a llegar a tapar a Nico- intentó saltar, e incluso lo tocó. No se inventaron nada. Interpretaron bien lo que ocurrió. ¡Ah! Y aprovechamos este espacio para reiterar que jamás entenderemos que, aquellos que hablan de ‘robos’ en el fútbol, sigan viendo el deporte. Nosotros no veríamos más fútbol si creyéramos que cada error arbitral o jugada polémica tiene como intención ayudar deliberadamente a alguno de los equipos. El ‘aficionado’ debe dejar emitir juicios tan a la ligera y, en algunos casos, asegurarse del fundamento reglamentario antes de comenzar a dispar contra todos. ¿Cómo tildar de robo una jugada tan apretada? No hay que caer en esos jueguitos. Criterio.
➔ Vinícius Júnior, la vía de desequilibrio. Cuando parecía que el gol del Ajax no tardaría en llegar, Vinícius hizo una jugada que solo está al alcance de futbolistas especiales. Control dirigido con la cabeza para dejar en el césped a Mazraoui, conducción + regate para dejar para sacar a los centrales de Ligt/Blind y pase con ventaja para Karim Benzema. Todo lo hizo bien. La firma fue del francés, pero el que destrozó a la defensiva del local fue Viní, quien tuvo como cómplice a Reguilón. Aún en una noche complicada, los dos jóvenes que juegan por el carril izquierdo del Madrid fueron decisivos. Y lo del brasileño no deja de ser superlativo. Hacer lo que está haciendo, con apenas 18 años, en su primer curso en la élite, y jugando para un equipo en clara etapa de transición, no es algo que se vea todos los días. Techo altísimo de cara al futuro.
➔ Reconocimiento al Ajax. El resultado no lo puede ser todo. Las formas, y más en un proyecto joven, importan mucho. Ajax cayó y lo más probable es que no puedan remontarlo. Sin embargo, se debe destacar como compitieron dignamente contra el equipo que manda en la UEFA Champions League. Presionaron con mucho sentido, generaron ocasiones a partir de construcciones colectivas y nunca permitieron que el Madrid se sintiera cómodo. La labor de van de Beek tapando a Casemiro y apareciendo en la frontal. Tadic como poste y mariscal. El demonio que fue David Neres por banda izquierda. El aporte de Ziyech cuando se metió entrelíneas. Y el cómo Frenkie de Jong y Lasse Schone fueron capaces de lidiar con los dos mejores interiores de las últimas Champions. Por cierto, esto no es consuelo, es analizar y rescatar la cosas positivas (que fueron muchas) en una noche de alto riesgo.
TOTTENHAM DEJÓ SEMINOQUEADO AL BVB
➔ Un 3-0 durísimo para el líder de Alemania. Borussia Dortmund se tronó tras el gol de Heung-Min Son. Su primer tiempo, entendiendo el contexto (fuera de casa y con jugadores clave fuera), fue realmente bueno. Sortearon la presión, estaban controlando a Eriksen y, aunque no intimidaban tanto arriba, tampoco estaban teniendo muchos problemas atrás. De hecho, en los 45 minutos iniciales, los spurs fueron incapaces de tirarles entre los tres postes. Pero, bueno, un gol a segundos de que iniciara el complemento, cambió todo. Tottenham supo que era su momento, llegaron las dudas en zona baja del BVB (qué desastre defendiendo balones horizontales) y los locales lo supieron capitalizar. El deporte es de momentos. Y el que mejor aprovecha el suyo, generalmente sale celebrando.
➔ Pochettino, un error y la pizarra. Sin Harry Kane y sin Dele Alli como opciones, y entendiendo que la visita jugaría sin 9 nominal y con ajustes en la línea defensiva, planteó un 3-4-1-2 en ataque y un 5-3-2 en defensa. De esta manera, partían en ventaja numérica en la última zona (buscaban contener los posibles contraataques). Y en el mediocampo, era un 3 vs 3, con la opción de recibir el apoyo de algún carrilero. Arriba: Eriksen en zona de mediapunta, permutas entre Son/Lucas y orden explícita de atacar a los laterales del BVB. El plan del argentino fue bueno, pero Favre también hizo lo suyo. Paró un 4-3-3 (4-1-4-1 al replegar) muy sólido. No estaban desesperados por el gol de visitante. Buscaron ser un equipo reactivo. Esperar, cortar la influencia de Eriksen y lastimar con alguna transición en velocidad. Al final, un error de Hakimi, quien creyó prudente tirar un caño, teniendo en Vertonghen/Eriksen en su zona, castigó mucho al Dortmund.
➔ El hombre de la noche. El MVP en Wembley fue el carrilero izquierdo que nominalmente no es ni lateral ni carrilero. Jan cumplió de forma fantástica con su rol. Fue a presionar a Hakimi en la salida, anticipó en varias acciones a Jadon Sancho y le puso criterio a sus intervenciones ofensivas. Hizo que sus proyecciones valieran la pena. Pase sensacional para Heung-Min Son y, por si fuera poco, gol cerrando como si se tratara de un extremo. El plan fue bueno. Tottenham ganó el partido a partir de lo que generó por el sector del futbolista que más veces se ha puesto la camiseta de la Selección absoluta de Bélgica.
➔ El factor Lloris y Winks. La labor del campeón del mundo debe valorarse. El fin de semana pasado, contra Leicester City, la victoria fue posible por las manos salvadores del francés. Y en este encuentro, cuando el panorama era incierto para el Tottenham, también se hizo notar. Insistimos en que BVB estuvo tan bien en el 1T que pudo ponerse al frente. Afortunadamente, el equipo del norte de Londres tiene en sus filas a Hugo. Otro elemento a resaltar es Harry Winks. Jugó con mucha personalidad. El chico fue clave en la salida de balón, entregó con éxito la mayoría de sus servicios (algo importante para cualquier mediocentro) y, junto a Sissoko, le otorgó más espacio/libertad para que Eriksen pudiera pesar más. Un trabajador silencioso.
➔ Dortmund y la búsqueda de la remontada. Escribimos que BVB está ‘semi KO’ porque, aunque Tottenham lo tiene muy encaminado, no tenemos duda de que Dortmund intentará la heroica. Plantarte en el Signal Iduna Park, en una noche de Champions, tiene un grado de dificultad significativo. La afición va a empujar todo el tiempo, BVB en casa no se guarda nada y saldrán con la mentalidad ‘nada que perder’ que tienen aquellos equipos que caen en la ida por un marcador abultado. El mejor Dortmund en la presente temporada es el que asfixia con su juego vertical. Y a esa versión, se le caen los goles. Eso sí, deberán tener muy presente que, a la contra, el conjunto de Pochettino tiene jugadores para penalizar. Será importantísimo que Reus pueda estar, que vuelva el 4-2-3-1 que Favre ha implementado y sacaríamos a Dahoud para poner a Guerreiro (banda derecha).
Esperamos que hayan disfrutado mucho de la lectura, Invictos. No duden en compartirnos sus impresiones en cualquiera de nuestras plataformas. Saben que siempre estaremos abiertos al intercambio/debate. La próxima semana también iremos a tope con la cobertura de las rondas KO de la bendita Shempions.