En plena época de COVID-19, sin tener un verdadero soporte mediático de los diarios más populares de Catalunya y sin poder reunirse en días de partido, los impulsores del movimiento para cargarse a Josep Maria Bartomeu y su junta reunieron más de las firmas necesarias para la moción de censura (requerían 16,520 firmas y consiguieron 20,731).
La Plataforma para la Moción de censura acaba de presentar 20731 firmas !!!!! pic.twitter.com/OzvizkWolV
— Alfredo Martínez (@Alfremartinezz) September 17, 2020
Miles de socios blaugranas se han unido porque no quieren esperar hasta -presuntamente- marzo para que los actuales directivos comiencen a despedirse. La intención es adelantarlo tanto como se pueda. Y este deseo ha provocado una movilización histórica (pese a las restricciones sanitarias, más firmas que en las mociones de Laporta contra Núñez y de Giralt contra Laporta).
💪 PODÍEM❗
— Plataforma Més que una Moció (@MesQueUnaMocio) September 17, 2020
🔥 VOLÍEM❗
✅ HO HEM FET❗
🚨 20.731 SIGNATURES 🚨
GRÀCIES VOLUNTARIS!
GRÀCIES SOCIS I SÒCIES!
G-R-À-C-I-E-S!#MesQueUnaMocio, una oportunitat per tornar a ser Més que un Club pic.twitter.com/r2MkUSH5iT
¿Qué sigue ahora? Bueno, pues, una vez presentadas las firmas en el Camp Nou, viene el proceso de validación. El club catalán deberá constituir la mesa de voto de censura, la cual contará con un plazo de 10 días para validar las firmas.
Si después de este procedimiento se mantienen 16,520+ firmas (lo normal sería que así fuera), si se aprueba el voto de censura, vendrá el referéndum. Y si en dicha votación, el 66.6% de los socios (dos tercios de mínimo el 10% de los socios del club) está en contra de Barto y su junta (votan ‘sí’ a la censura), tendrán que marcharse. Con esto, se adelantarían las elecciones (octubre o noviembre) y, mientras tanto, una junta gestora asumiría el cargo de la entidad.
🚨 ÚLTIMA HORA 🚨 @MesQueUnaMocio entrega 20.731 signatures al club
— Esport3 (@esport3) September 17, 2020
Més 👉 https://t.co/AE35ZWzFSX pic.twitter.com/RRCbAJKSL0
El mensaje de hartazgo es clarísimo. La gota que derramó el vaso fue el caso Lionel Messi. Después de tantos papelones, no quieren que Bartomeu y su gente se vayan en sus términos. Los están echando.