No quiso conceder entrevistas, pero Vinicius Júnior no se guardó su sentir tras haber sido expulsado durante el partido de Liga de España entre el Real Madrid y el Valencia.
Tan solo unos minutos después de que finalizara el encuentro, el extremo brasileño cargó contra la Liga de España con el siguiente mensaje: «EL PREMIO QUE LOS RACISTAS GANARON FUE MI EXPULSIÓN. NO ES FÚTBOL, ES LA LIGA».
El canterano del Flamengo, obviamente, se mofó de la frase ‘no es fútbol, es la Liga’ con la que los españoles promocionan su producto. Y es que le resulta increíble que él termine expulsado en una tarde en la que fue víctima de insultos racistas.
VINICIUS JÚNIOR CARGÓ CONTRA LA LIGA
Los insultos racistas contra Vinicius iniciaron después de que el sudamericano se involucrara en una disputa con algunos futbolistas del Valencia (cuando hubo dos balones dentro del campo). A partir de ese momento, las cosas se salieron de control en Mestalla.
El atacante brasileño hizo ver que lo ofendieron con temas raciales, señaló directamente a alguien en la grada, vinieron más cánticos y gritos, el partido se detuvo unos minutos, Carlo Ancelotti le reclamó furioso al árbitro central y el sonido del estadio tuvo que intervenir. Lamentable, ni el mensaje contra el racismo detuvo la situación.
Pasaron los minutos, y la tormenta continuó. Vinicius Júnior se fue expulsado luego de involucrarse en una trifulca dentro del área. En principio lo habían amonestado, pero intervino el VAR y el colegiado principal lo terminó echando.
Mientras salía del campo, los insultos -de todo tipo- no pararon y el jugador del Real Madrid hizo el gesto de que el Valencia, que está luchando por permanecer en la Liga, es un equipo de Segunda División. Esto molestó a futbolistas del cuadro local, quienes se pararon del banquillo para ir a buscar a Vini.
Disputas físicas, insultos, racismo y provocaciones. Todo mal. Y sí, aunque la respuesta de Vini no se puede promover y aplaudir, el tema del racismo es algo penoso, lamentable y vergonzoso. Pleno 2023 y todavía se siguen viendo este tipo de casos.
Si hay inadaptados que no entienden que no hay cabida para el racismo, la Liga debe comenzar a intervenir con vetos o sanciones deportivas. Con algo que les duela, ya que hay quienes, por un pagar un boleto, creen que tienen licencia para hacer y decir cualquier barbaridad.